La Guardia Civil ha informado este viernes del hallazgo de huesos "posiblemente humanos" en aguas de Porto do Son (A Coruña), a aproximadamente una milla del lugar en el que en julio de 2020 desaparecieron dos jóvenes que iban a bordo de un kayak.

Los restos óseos, que según una primera observación parecen corresponderse con "una columna vertebral", fueron recogidos en el aparejo de una embarcación de pesca en las inmediaciones de la Capela da Atalaia.

En diciembre ya se habían localizado huesos que resultaron ser de uno de los jóvenes kayakistas, aunque en aquella ocasión se encontraron más cerca de donde había tenido lugar el suceso, en las inmediaciones de la playa de Coira. La profundidad a la que se encontraban sí es la misma, entre 22 y 25 metros.

Los restos le han sido entregados al Equipo Territorial de la Policía Judicial (ETPJ) para su posterior estudio y análisis. El pasado mes de diciembre el Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga) necesitó un mes para confirmar que los huesos se correspondían con uno de los kayakistas.

Desaparición el 6 de julio de 2020

La desaparición de los dos jóvenes se remonta al 6 de julio del 2020. El accidente tuvo lugar en la playa de Coira, en la localidad de Portosín, donde tres amigos -dos chicos y una chica- hacían uso de un kayak.

Ese mismo día sobre las 21,30 horas, un particular avisaba al 112 de que hacía tres horas que los tres jóvenes habían salido a navegar y no habían vuelto. Tras conocer los hechos, Salvamento Marítimo movilizó un dispositivo de búsqueda con medios marítimos y aéreos, además de terrestres y subacuáticos.

Los servicios de emergencia localizaron el día de la desaparición el kayak volcado y rescataron a la chica en tierra, tras lo cual fue trasladada al Complexo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS). Las otras dos personas que viajaban en el kayak, dos varones, permanecen desde entonces en paradero desconocido.