Protesta contra la mina de San Finx.

Protesta contra la mina de San Finx.

Barbanza

Más de 300 personas claman contra la mina de San Finx, en Lousame (A Coruña)

Los manifestantes rechazan los vertidos y el "catastrófico" impacto que tienen sobre el sector del mar y, en particular, sobre la ría de Muros e Noia

8 julio, 2023 17:24

Más de 300 personas se han movilizado esta mañana frente a la mina de San Finx, en Lousame, en defensa de la ría de Muros e Noia. Los manifestantes han clamado contra los vertidos que, aseguran, amenazan al sector del mar y ha definido como "catastrófico" el impacto que tienen.

"Amosamos unha vez máis a nosa oposición absoluta a que se poña en risco o futuro da ría e dos millleiros de empregos que xera, non imos deixar que os verquidos saian adiante", aseguró el portavoz da Plataforma de afectados pola mina de San Finx, Joám Evans.

El patrón mayor de la Confraría de noia, Santiago Cruz, instó por su parte a la Xunta a cambiar sus políticas medioambientales, de las que dijo que son "un fracaso". "As rías están morrendo pouco a pouco", aseguró Cruz, que añadió: "Non entendemos como a Xunta está en contra dos pobos mariñeiros e permiten este dano medioambiental irreparable".

El patrón mayor de la Confradía de Portosín, Isaac Gaciño, incidió por su parte en la firme oposición a nor permitir ningún tipo de toxicidad en la ría. "Son moitos postos de traballo, moitas familias as que viven dela e a loita non para aquí. Son 40.000 os postos de traballo directos e indirectos os que están en xogo e non podemos permitir que a calidade dos nosos produtos sexa contaminada", indicó Gaciño.

El viceportavoz de la plataforma, Rogelio Santos Queiruga, reflexionó sobre la importancia de cuidar las rías si se quiere una buena alimentación para la sociedad. La Plataforma comarcal contra los vertidos, encabezada por las cofradías, exige a la Xunta que "revoque a autorización concedida á mineira australiana" después de que, además, "se incumprise o condicionante de ter finalizadas as obras en catro meses".

La protesta terminó con un entierro simbólico de los productos de la ría con la compañía de teatro Os Quiquilláns, un concierto del grupo musical Barahúnda y una degustación de productos de la ría ofrecida por la Confraría de Noia. Esta entidad avisa, además, de que la degustación podría ser la última si se permiten los vertidos de San Finx.