Hay caso abierto en la ciudad bañada por el Miño. El Niño Jesus del controvertido Belén municipal de Ourense ha sido robado por segunda vez en apenas dos días. Desapareció solo unas horas después de que Gonzalo Pérez Jácome, alcalde de Ourense, lo pusiese a salvo de sus "secuestradores".

Eso sí, sin las dos manos. El muñeco había sido mutilado previamente, pero el alcalde aseguró que "no se ha pagado ningún tipo de rescate" y que "se reparará y doblegará la seguridad". Mientras muchos se preguntaban ante quien se van a "doblegar" los agentes de seguridad, otros le encontraban ventajas a la ausencia de brazos.

Sin embargo, la recuperación del Niño Jesús no fue el final de esta rocambolesca historia. Durante la Nochebuena, su figura volvió a desaparecer del pesebre y fue visto por última vez en la zona de Os Viños. Sus captores lo exhibieron durante una larga noche de fiesta en Ourense.

A estas horas, todavía se desconoce el paradero del Niño Jesús. Este nuevo revés ha golpeado con fuerza a Pérez Jácome. "Se va a denunciar a la Policía para intentar localizar a los autores" de esta sustracción, ha dicho el regidor, que ha lamentado los ataques sufridos por la instalación, que le han hecho replantearse su proyecto de "convertir el casco viejo en un Belén" en años posteriores, un plan "totalmente inviable" porque "necesitaría una vigilancia constante, visto lo visto".

Jácome ha calificado el Belén de Ourense como "el más atacado y con más secuestros de España" y ha lamentado los actos vandálicos, que han dañado otras figuras y han propiciado la desaparición de un Jesús que estaba "pegado con cola".

Pese a todo, Pérez Jácome sí que encontró un motivo de celebración. El alcalde ourensano ha señalado que gracias a su gestión y al Belén, Ourense estaba en "todas las noticias". También ha destacado el "valor artístico" de las figuras y el gran número de personas que se han acercado a verlo. "El Belén es un tema subjetivo, a muchos no les gusta, a otros si, pero es muy particular", ha explicado el alcalde, para quien "el éxito ha sido impresionante" y las visitas a la instalación hacen que la inversión "esté amortizada".