Coronavirus: Detenido un empresario por robar 2 millones de mascarillas en Santiago
Lo sustraído en una nave del Polígono del Tambre, valorado en unos cinco millones de euros, se ha vendido a una empresa de Portugal
6 abril, 2020 12:13La Policía Autonómica ha detenido a un empresario por su supuesta implicación en el robo de casi dos millones de mascarillas, entre otros materiales sanitarios, en una nave situada en el polígono del Tambre de Santiago de Compostela.
El operativo comenzó tras recibir el aviso de que en la nave podría haber una "gran cantidad de mascarillas del modelo FFP2, guantes quirúrgicos, pantalones, uniformes sanitarios, botiquines y alcohol", según informó la Vicepresidencia de la Xunta en un comunicado.
La empresa, que se dedica a la venta de material sanitario, está actualmente en situación concursal, según apuntan desde la Xunta. Así, ante este aviso, los agentes solicitaron la autorización del administrador concursal y accedieron al interior de la nave, donde comprobaron que la mercancía había sido sustraída.
En concreto, las mascarillas fueron robadas casi en toda su totalidad, ha puntualizado la Xunta, ya que quedaron unas mil unidades. Todo el material robado, para el que se estima un valor aproximado de cinco millones de euros, fue extraído de sus cajas y plásticos protectores con el "objetivo de ocultar su procedencia".
"Material necesario"
La Vicepresidencia de la Xunta ha detallado que "todo parece indicar que el robo se produjo cuando la pandemia del coronavirus ya estaba presente en varios países y era considerado un problema de salud pública".
Por ello, los autores del robo "eran plenamente conscientes de que éste era un material muy necesario en la lucha contra la enfermedad y que ya empezaba a escasear en el mercado", señalan estas fuentes. De hecho, se hicieron con los materiales que "más demanda tiene actualmente y dejaron otros que no están tan solicitados, como botas o botiquines".
Cámaras de seguridad
A partir de ese momento comenzó la investigación a través del examen de indicios, la comprobación de las cámaras de seguridad y la declaración de testigos. De este modo, "toda la investigación apuntó a un empresario de la ciudad" que había sido visto alrededor de la nave y que, recientemente, había mantenido supuestamente una reunión con ciudadanos portugueses que, con posterioridad, accedieron al interior de esta empresa.
La hipótesis actual es que, tras robar el material, este fue vendido a una empresa afincada en Portugal. Por ello, se ha procedido a la detención del empresario por su supuesta participación en los hechos. Una vez tomada declaración, ha sido puesto a disposición judicial.
En la actualidad prosiguen las pesquisas para localizar al resto de autores y las personas que recibieron el material en Portugal, por lo que se ha solicitado la colaboración de las fuerzas y cuerpos de seguridad del país vecino.