Los primeros pacientes gallegos que superaron el coronavirus ya están donando su plasma para ser usado como tratamiento contra este virus que ya deja cerca de 500 muertos en Galicia. De momento, la finalidad de este proceso es estudiar el uso de anticuerpos de aquellas personas curadas y ver sus beneficios en aquellos que todavía están en fase activa de la enfermedad.

Esta medida puesta en marcha por la Consellería de la Xunta de Galicia en colaboración con la Agencia de Donación de Órganos y Sangre de Galicia (ADOS) ha arrancado en Vigo. En concreto, los pacientes han sido seleccionados por el servicio de Hematología y Hemoterapia del Complexo Hospitalario Universitario de Vigo (CHUVI). Una vez elegidos, en la mañana de este miércoles se ha iniciado, en el local de donación de ADOS en Vigo, la extracción del plasma a través del proceso de aféresis, un sistema que permite la extracción selectiva de los componente sanguíneos.  

Los criterios de selección de potenciales donantes establecen que los participantes hayan tenido un diagnóstico de COVID-19 documentado por prueba de laboratorio, con buen estado de salud y asintomáticos, y que hayan pasado catorce días desde tener evidencia PCR negativa y recuperación total.

Asimismo, se establece un estricto protocolo de donación de plasma y una determinación de ‘Ac anti SARS-Cov-19’. Todos los participantes deberán realizar antes un consentimiento informado para formar parte de este estudio clínico.

Posteriormente, la Axencia se responsabiliza del tratamiento y la inactivación de las unidades de plasmaféresis obtenidas con azul de metileno. Las muestras procesadas en ADOS serán criopreservadas, se almacenarán a -30 grados y tendrán una vida útil de hasta dos años.

Estas unidades se validan y etiquetan atendiendo a los criterios estándares de calidad marcados por el Comité de Seguridad Transfusional del Ministerio de Sanidad, y su uso será exclusivo para la investigación en pacientes con confirmación COVID-19.

ADOS ha destacado que el estudio iniciado este miércoles en Vigo continuará en todos los hospitales del sistema público de salud de Galicia.