Nuevo caso en Galicia de una persona que se salta las limitaciones de movilidad impuestas por el estado de alarma. La crisis sanitaria ha obligado a prohibir los movimientos entre provincias para evitar la expansión del coronavirus. Sin embargo, no siempre hay controles para asegurarse de que se cumplen estas normas.

En este caso, un ciudadano residente en Córdoba fue interceptado por la policía local de Lugo. Los hechos ocurrieron esta pasada madrugada, cuando una patrulla de agentes que se encontraba realizando controles para velar por el cumplimiento del estado de alarma dio el alto a su vehículo.

Tras comprobar sus datos, el hombre fue incapaz de justificar a los policías el motivo de su viaje. En total, esta persona había recorrido 860 kilómetros de distancia entre ambas localidades sin ser interceptado. Un viaje de más de ocho horas que terminó con una sanción que puede alcanzar los 30.000 euros por desobedecer las restricciones del estado de alarma.

Este suceso recuerda al ocurrido a hace dos semanas también en Lugo. Allí fue interceptado un conductor que procedía de Bélgica mientras viajaba a Santiago de Compostela. El hombre, de 39 años, no fue interceptado en ningún control hasta Pedrafita do Cebreiro y, además, aportó un carné falso.