Amigos de Samuel en la concentración de María Pita.

Amigos de Samuel en la concentración de María Pita. Quincemil

Galicia

Carta de los amigos de Samuel: "No puedo hacerme a la idea de no dar un paso más a su lado"

Dos hombres que socorrieron al joven en el lugar de los hechos confirmaron que vieron a un grupo de 12 personas y sus amigos aseguran que "fue un crimen homófobo sin duda alguna"

6 julio, 2021 15:52

ACTUALIZACIÓN (18:54): La Policía Nacional ha detenido a tres vecinos de A Coruña, de entre 20 y 25 años, como presuntos autores de la paliza mortal al joven Samuel en la madrugada del sábado. Testigos presenciales del crimen estiman que la agresión fue propiciada por una pandilla de 12 personas que tienen entre 20 y 30 años. La investigación continúa abierta hasta "el total esclarecimiento" de los hechos, aunque "no se descartan más detenciones en las próximas horas", según indica la Policía Nacional a través de sus redes sociales.

Según ha podido saber El Español esta tarde a raíz de las detenciones, los tres pertenecen al mismo grupo de amigos, tienen nacionalidad española y son vecinos de A Coruña. Dos de ellos, según ha podido conocer este periódico a través de fuentes de máxima solvencia, serían los que agredieron en un primer momento a Samuel, antes de que el resto de agresores, amigos de los primeros se unieran a la persecución y la paliza. El tercero de los detenidos por los investigadores sería uno de los que en los minutos siguientes se sumó a los golpes y pateó al chico hasta dejarlo sin vida en la Avenida de Buenos Aires, en el Paseo Marítimo de A Coruña.

La masiva concentración de repulsa y para pedir justicia por Samuel que desbordó ayer María Pita, a la que secundaron otras por diferentes puntos de España, ha dejado paso a días duros, pero también cruciales en A Coruña en lo referente a la investigación de lo ocurrido este fin de semana con el joven de 24 años, que perdió la vida tras una brutal paliza. Esta mañana han intervenido en televisión los amigos del coruñés y también las dos primeras personas que le socorrieron tras encontrarlo en la calle minutos después de la agresión.

"Ayer conocimos a la única persona que ayudó a nuestro amigo e intentó salvarle la vida y tenía miedo a testificar porque no tenía papeles, tanto él como su amigo. Pedimos por favor que se les den los papeles porque son personas increíbles y se merecen esto y mucho más", afirmaba esta mañana Sofía, una amiga de Samuel, en el programa matinal de AR. "Al acabar la manifestación estuvimos con él y fueron ellos quienes agarraron a Samuel para intentar arrastrarlo y apartarle y que dejaran de pegarle, pero eran dos contra una manada", lamentó Sandra, la mejor amiga del joven. "En nombre de todos nosotros y la familia queremos dejar claro que no tenemos nada que ver con la politización que se le está haciendo a Samuel, no queremos que su cara se use para batallas políticas sino que lo que deseamos es hacer justicia con lo que ha pasado, nada de políticos ni banderas", aseguró Leo, otra de las amistades del fallecido.

En esta conexión en directo, la mejor amiga de Samuel leyó unas palabras que escribió anoche y que representan el sentir de todos los que le conocían. "Nunca me había imaginado la sensación de vivir un asesinato más allá de especular viendo una película, pero ahora que lo he vivido sigo sin imaginarme lo que siento yo misma, no me lo creo, no lo acepto estoy perdida", comenzaba la joven con lágrimas en los ojos. "La sensación es rara, a veces estoy eufórica, otras me derrumbo y por momentos pienso en llamarlo y al instante recuerdo que no está. En ocasiones me hundo y no quiero seguir creciendo sin él, otras veces me río y me autoconvenzo de que es otra broma de las suyas", continuó la coruñesa, a lo que añadió que "lo único que sabe con certeza es que no se lo cree ni quiere hacerlo porque le parece surrealista tener que aceptar y asumir que una persona acompañada por su grupo asesine a otra sin razón ni motivo alguno dándole una enorme importancia a su orientación sexual".

"Samuel y yo caminábamos juntos desde que éramos unos mocosos y no puedo hacerme a la idea de no dar un paso más a su lado. No soporto el pensar qué será ahora de mi vida sin Samuel, este 3 de julio me han arrebatado a mi mejor, a mi hermano, a la persona que cualquiera quisiera tener al lado, un trozo enorme de mi vida", lamentó visiblemente emocionada, para concluir expresando que "cada día que pasa le destroza pensar en el dolor que ha pasado, el miedo que tuvo y la desesperación de sentir como te están matando mientras pedía ayuda". "Como gran amigo, como un buen hermano, Samuel no nos juzgaba, simplemente se limitaba a querernos", dijo orgullosa.

"Fue un crimen homófobo sin duda alguna"

Durante la intervención en televisión de los amigos de Samuel, todos coincidieron al afirmar que "fue un crimen homófobo sin duda alguna", a la vez que subrayaron que "no buscan venganza ni que se apedree a los implicados, solo que se haga justicia, que Samuel descanse en paz y que sus padres consigan de alguna manera superar esto y continuar con su vida". En este sentido, según ha adelantado El Español esta mañana, los primeros indicios recabados por los investigadores apuntan a que el móvil de la agresión no fue la homofobia. El motivo de la fatal paliza, que se extendió durante 15 minutos y más de 200 metros de persecución, habría sido un malentendido por una videollamada a las 03:00 de la madrugada y supuestamente los autores no tendrían constancia de la orientación sexual de la víctima.

Además, según fuentes cercanas a la investigación, se ha tomado ya declaración a 15 personas relacionadas con la pelea. Un grupo que precisamente fue visto el día de los hechos por Marco y Pablo, dos hombres que pasaron por las inmediaciones de Riazor pocos instantes después de la paliza y que fueron los primeros en socorrer a Samuel para intentar salvar su vida. "Vimos a una pandilla de chavales, todos muy jóvenes en torno a los 30 años como máximo y latinos, mulatos. En ese momento veo que hay alguien en el suelo y no me esperaba que fuera un chico en coma", explicó Pablo, a la vez que rememoró que Marco y él realizaron labores de reanimación a Samuel mientras otra viandante, Begoña, llamó a una ambulancia.

"Fue todo rápido y desagradable"

En un primer momento llegó al lugar de la agresión una ambulancia no medicalizada y la policía municipal e instantes después una ambulancia medicalizada en la que el joven fue trasladado al CHUAC de A Coruña. Marco tuvo un importante papel en las labores de reanimación de Samuel, ya que recuerda que le quitó parte de la ropa "para hacerle una especie de almohada y que estuviera cómodo", mientras lo ponía en posición lateral de seguridad. "Le tomé varias veces el pulso, le hablé y le intenté despertar pero estaba en coma totalmente. Le tomé el pulso tres veces y durante esos minutos yo no se lo encontré, la ambulancia tardó en venir un rato y luego vino otra y debimos de estar un poco más de una hora allí socorriéndolo", cuenta.

"Tengo casi 50 años e hijos de la edad de Samuel y para mí en esa situación era como si fuera un hijo más, por eso estuve allí para que no se quedase solo, fue todo rápido y desagradable", lamenta. A su vez, sobre una posible identificación de los agresores, Pablo asegura que "no sería capaz de reconocerlos porque pasaron rápido por delante de ellos en una calle estrecha" pero sí concretó que "eran un grupo de 12 personas". Acerca de las teorías sobre lo ocurrido con el móvil de Samuel, Pablo confirmó que "el grupo se lo llevó", un dato que apuntó que ya conocen las autoridades.

"Los agresores de Samuel pensaron que no les veía nadie pero se equivocaron porque hubo un vecino que los vio. Bajo mi punto de vista se llevaron el teléfono porque pensaron que el motivo por el que se inició la discusión podía estar ahí y que así no pasaría nada, pero no contaron con que a día de hoy las autoridades te geolocalizan con los teléfonos e igual gracias a eso lo que pasó se podrá aclarar", concluyó el coruñés con la esperanza de que pronto se conozcan más datos sobre lo ocurrido y se haga justicia con Samuel.