El 30 de abril de 2021 entró en vigor una reforma en la ley de Registro Civil prevista desde 2017, lo que se traduce en una mayor agilidad para los futuros matrimonios de cara a tramitar el expediente matrimonial previo al enlace. Así lo ha concretado la vicedecana del Colegio Notarial de Galicia (integrado por 160 profesionales), María José Gil, que apuntó que el número de expedientes designados desde la reforma avanza a buen ritmo y ya supera el centenar.

Hasta ahora y desde 2015, los notarios podían celebrar matrimonios pero no hacer el expediente previo a la celebración de la boda, es decir, un documento que acredita la capacidad de las personas que conforman la pareja para contraer matrimonio a la vez que demuestra que no tienen impedimentos en cuanto al enlace. "La administración de justicia está colapsada y a través del Registro Civil suele tardar más el expediente que si se realiza el trámite en una notaría, que es más rápido", explica Gil, que tiene su despacho en el centro de A Coruña.

En concreto, según la vicedecana el trámite de realizar al completo el expediente matrimonial gracias a la reforma "se puede completar en una semana o dos", aunque advierte que al hacerlo en el notario "conlleva un coste". El pasado mayo, según datos del Colegio Notarial de Galicia, ya se llevaban más de un centenar de expedientes de este tipo turnados, algo sobre lo que Gil afirma que "son bastantes en el poco tiempo que lleva esto en marcha".

Notario designado por turno y acta final con la decisión

El proceso para tramitar el expediente matrimonial completo tiene varios pasos. Inicialmente los ciudadanos deben dirigirse al Colegio Notarial, donde se les designará un notario por turno. Cuando la información correspondiente sobre la pareja que se va a casar llega al notario, se firma el expediente y todo estará listo en un par de semanas "salvo que haya que realizar alguna diligencia complementaria", advierte la vicedecana. "Hasta el 30 de abril de 2021 si celebrábamos matrimonios pero la tramitación previa no porque la Ley de Registro Civil, que es de 2011, lo tenía previsto pero no había entrado en vigor y se fue prorrogando", comenta.

Una vez realizado el expediente la pareja es libre de elegir al notario que desean que les case pero la documentación previa "es un expediente administrativo que tiene normas de orden público y es turnado desde el Colegio Notarial en función del domicilio de los contrayentes", detalla Gil. "Si vives en A Coruña te corresponde un notario de la ciudad y los turnos son rotatorios. Si vives en Arteixo ahora hay dos notarios y se van turnando", ejemplifica, al mismo tiempo que asegura que "se puede celebrar el matrimonio ante otro notario u otro tipo de funcionario distinto".

"Es un expediente más, una carga de trabajo asumible para los notarios. Pero es algo nuevo y un reto hacerlo bien", reconoce la vicedecana, que informa a su vez de que una vez tramitado el expediente el notario emitirá un acta final con la decisión favorable o desfavorable en cuanto a los futuros contrayentes. "Se celebrará una audiencia reservada con la pareja, deben ir al expediente con dos testigos y una serie de documentación que se les requiere. En función de todo esto, si el acta final es favorable se dirá que a juicio del notario tienen capacidad para contraer matrimonio y que no existen impedimentos", dice.

"Falta de medios" en Justicia y régimen económico del matrimonio

"El Registro Civil tiene mucho volumen y a la administración de Justicia le faltan medios", asegura Gil, sobre lo que matiza que hace años, en cuanto los notarios pudieron celebrar matrimonios, "mucha gente les solicitaba también el expediente previo", algo que hasta este 2021 no podían hacer y que era labor del encargado correspondiente del Registro Civil. "Nos lo pedían porque sabían que este proceso ante notario era más rápido", admite.

Una de las principales novedades en cuanto al expediente matrimonial, según la vicedecana, es que "debe constar en la decisión final el régimen económico del matrimonio y que comuniquen ante quien quieren contraer matrimonio". Este último aspecto puede decantarse por parte de la pareja en que les case el mismo notario que hizo el expediente u otro funcionario (alcaldes, por ejemplo) o incluso ante el encargado del Registro Civil, todo gracias a una nueva instrucción que entró en vigor el pasado 3 de junio y que aclara esta posibilidad.

"Los Registros Civiles deben digitalizarse para avanzar"

Susana Mora, notaria en Vimianzo (A Coruña), lleva ejerciendo desde 1995 y considera que "el servicio notarial es más cercano al ciudadano y ofrece más flexibilidad de horario y un trato más directo, con la contrapartida de que el notario hay que pagarlo", explica. "Los notarios no recibimos retribución por parte del Estado pero recurrir a nuestra figura tiene la ventaja de que el proceso para hacer el expediente matrimonial es más rápido y cercano", reconoce, aunque considera que "lo ideal" es que los ciudadanos puedan escoger las dos opciones (la otra es a través del Registro Civil).

La reforma que arrancó hace unas semanas y que permite a los notarios realizar el papeleo correspondiente a los matrimonios en su totalidad, estaba prevista para 2017 y su retraso, en palabras de la profesional, se debe "a un problema sobre todo a nivel de Registro Civil". "Estamos en una situación que todavía no es la ideal porque tendríamos que tener una comunicación telemática entre la notaría y el Registro Civil que no existe ahora mismo", expone, mientras informa de que "los Registros Civiles están en ello, con el reto por delante de digitalizar los tomos que tienen", asegura. "Es una labor muy ardua y el día que se consiga este tipo de comunicación todo irá mejor", subraya.

Sobre la posibilidad de realizar los expedientes matrimoniales en la notaría, advierte a las parejas que "eso no significa que tengan que contraer matrimonio allí, sino que pueden tramitar el expediente con el notario y luego contraer matrimonio en el juzgado o en el ayuntamiento". De momento, ella no ha tramitado ningún expediente de este tipo y su labor comprende el área de Vimianzo y alrededores (Camariñas, Zas, Dumbría o cualquier zona próxima que carezca de notarías).

En cierto modo, se siente un poco extrañada porque en un primer momento pensó que este tipo de expedientes "podían tener más demanda", pero considera que en zonas pequeñas como en la que ella ejerce "el Registro Civil no está tan saturado", a la vez que supone que "en los pueblos no tienen las esperas que pueden producirse en las ciudades para tramitar este expediente". A su vez, desde que entró en vigor la ley que dio potestad a los notarios para poder casar, la profesional asegura que ha tramitado dos matrimonios.

Asimismo, Mora coincide con la vicedecana del Colegio de Notarios de Galicia en la necesidad de modernización de la administración como clave para el futuro de la profesión. "Una vez tengamos la comunicación telemática esta reforma será perfecta porque da la doble opción y no se obliga a que el expediente se haga en la notaría", concluye.