Galicia se librará de la lluvia ácida del volcán de La Palma, según los últimos cálculos
El Servicio de Monitoreo de la Atmósfera Copernicus prevé que los gases tóxicos del volcán cubran el viernes parte de la Península
22 septiembre, 2021 17:55El volcán Cumbre Vieja de La Palma entró en erupción el domingo y desde entonces todas las miradas están puestas en el avance de la lava que, a su paso hacia la costa, ya se ha llevado por delante casas y carreteras. Esta erupción volcánica está expulsando gases tóxicos -dióxido de azufre SO2- que con el avance de las horas se expanden por el territorio canario y, según los últimos cálculos, se prevé que alcancen a parte de la Península. Sin embargo, en base a las úlimas predicciones, Galicia se libraría de la entrada de estos gases, que están detrás de la conocida como lluvia ácida.
El Servicio de Monitoreo de la Atmósfera Copernicus prevé que para el viernes las 09.00 UTC (10.00 hora canaria) el dióxido de azufre empiece a avanzar por el Mediterráneo, pudiendo llegar a afectar hasta la zona centro de la península. Según este mapa de predicción la peor parte se la llevarían las Baleares.
Este rumbo hacia el este es debido a la influencia de los vientos previstos para estas próximas jornadas, cuya dirección hace que los gases en suspensión se dirijan hacia la zona este de la península, dejando a la mitad oeste (donde se encuentra Galicia) fuera de la alerta por la llegada de los gases del volcán de la Palma.
El dióxido de azufre es un gas irritante e incoloro, con un olor penetrante, y es el principal causante de la lluvia ácida, que se podría producir en algunos puntos de la Península y Baleares si los gases tóxicos del volcán se juntan con el agua de las nubes.
Tal y como se recoge en la simulación realizada por Mark Parrington, investigador senior del Servicio de Monitoreo de la Atmósfera Copernicus, los gases tóxicos no afectarían a la zona de Galicia, que se libraría de la consecuencias atmosféricas del volcán canario.
Al parecer, según apuntan varios expertos, las partículas de dióxido de azufre llegarían muy diluidas a la Península, por lo que en principio no plantearía mayores problemas para la ciudadanía y el medio ambiente.