Carril, reelegido al frente de la CIG, pide consolidarla como primera fuerza sindical gallega

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 9 Oct. (EUROPA PRESS) –

Paulo Carril ha sido reelegido como secretario xeral de la Confederación Intersindical Galega (CIG) en el VIII Congreso celebrado este sábado en el Palacio de Congresos e Exposicións de Galicia, en Santiago de Compostela. En su discurso de cierre, ha hecho un llamamiento a "consolidar y ampliar" la posición de la organización como primera fuerza sindical "en representatividad, afiliación y capacidad de movilización".

Además, Carril (que revalida el cargo por 464 votos a favor, 35 en blanco y siete nulos) ha apelado a que, en los próximos cuatro años de mandato, la CIG siga como "referente" en la lucha por el "feminismo de clase" y por la "soberanía nacional" de Galicia como "sindicato nacionalista" que es.

En este contexto, ha ensalzado a la CIG como "resultado de la construcción hecha con un inmenso y auténtico sentido colectivo", porque en esta central "los liderazgos son colectivos y el papel de las personas es secundario".

"Lo único imprescindible es el sindicato", ha exclamado el secretario xeral, ovacionado por los suyos, para más tarde defender su apuesta por "una central sindical única gallega". El objetivo, ha dicho, es que la CIG sea un "instrumento útil" como "contrapoder real a la explotación de clases".

Tras realizar un análisis de la actual situación económica, política, social y laboral en un contexto de pandemia cuando Galicia "todavía sufre" las consecuencias de la crisis del 2008, Carril ha criticado cómo la Unión Europea se encuentra "al servicio del capital financiero" y "en sumisión a Estados Unidos y a la Otan".

"Estamos viviendo una nueva ofensiva del capital contra el trabajo", ha avisado, advirtiendo además de que esto lo promueven "tanto gobiernos conservadores como socialdemócratas". Y ha denunciado las consecuencias de unas políticas "neoliberales" que trajeron "pobreza, desempleo y exclusión social, pero también el fascismo", que tiene así "su caldo de cultivo". A esto ha añadido el "españolismo sin complejos, disfrazado de una falsa progresía que refuerza la apuesta por un Estado español unitario y negador de la realidad plurinacional".

Critica el diálogo social

Carril ha criticado el diálogo social que en la actualidad sirve para "desmovilizar" a los trabajadores, para "justificar los incumplimientos programáticos del Gobierno", entre ellos la no derogación de la reforma laboral, y para "esconder su debilidad frente a la patronal".

Por eso mismo, el dirigente de la CIG ha lamentado el papel del "sindicalismo español", al que ha acusado de renunciar a "dar la batalla ideológica y política necesaria para contribuir a un cambio real de políticas y del actual modelo económico y social". Al hilo de ello, ha cargado contra la gestión del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, que solo favorece (ha dicho) a la "crisis industrial y social" de la comunidad gallega.

Así, el recién reelegido secretario xeral ha alertado también de que los paquetes de reformas poscovid son, en resumen, la "imposición de nuevas reformas, como la de las pensiones, así como la consolidación de las anteriores" en el ámbito de los "recortes del gasto público".

Próxima huelga general

Asimismo, Carril ha instado a los cientos de asistentes al VIII Congreso a "tomar iniciativas movilizadoras" y a impulsar una campaña que concluya con la convocatoria de una huelga general "si no se dan avances" en reivindicaciones relativas a la recuperación económica, a la industrialización, a la creación de empleo digno y en la defensa de los servicios públicos y de los derechos laborales.

En este sentido, ha hecho un llamamiento al resto de sindicatos: "Si realmente se consideran dignos de tal, pongan en la agenda también esta huelga, porque la lucha es el único camino".

Durante su alocución, Carril ha pedido una gran ovación para los ya exmiembros de la Executiva Margarida Corral (hasta ahora secretaria das Mulleres) y Fran Cartelle (ex secretario confederal de Emprego), que se despiden de la dirección tras llevar ya 12 años en ella, el máximo previsto por los estatutos.

Nueva ejecutiva

El VIII Congreso de este sábado ha elegido a la nueva Executiva Confederal (por 477 votos a favor, 29 blancos y tres nulos), que queda compuesta por Paulo Carril Vázquez, Susana Méndez Rodríguez, Paulo Rubido Bará, Francisco González Sío, Antonio Mera de La Fuente, Lucía Freire Ces, Miguel Malvido Cabirto, Nicolasa Castro Monteiro, Cristina Martínez Padín, Anxo Noceda Carballo, Renato Núñez Da Silva y Diana Rodríguez Regueira.

Este evento ha arrancado sobre las 09:30 de la mañana con la votación de su reglamento, con la intervención del secretario comarcal de la CIG en Santiago, Pepe Maio, y con la visualización de un vídeo que ha hecho un recorrido por la acción sindical desarrollada en los últimos cuatro años. Los delegados asistentes también han dedicado un minuto de silencio en memoria de quien fue secretario comarcal en Ourense, Etelvino Blanco, fallecido en 2019.

A este cónclave de la CIG, que se ha prolongado hasta las 20:00 de la tarde, han acudido representantes de formaciones políticas y plataformas vinculadas al nacionalismo, entre ellos la portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, el dirigente de Anova y exalcalde de Santiago Martiño Noriega, y el presidente de A Mesa pola Normalización Lingüística, Marcos Maceira, entre otros.

Por parte de más de 20 sindicatos de otras partes del Estado español y del mundo, han asistido la secretaria general de LAB, Garbiñe Aranburu; el secretario general de la Intersindical catalana, Sergi Perelló; el secretario general de ELA, Mitxel Lakuntza; y el responsable de Relaciones Internacionales de la CGTP, João Barreiros, entre otros.