Un paseo por los alrededores del Aeropuerto de Santiago-Rosalía de Castro esta Semana Santa deja una estampa inusual: decenas de vehículos se agolpan en cunetas, calles y fincas, llegando a ocupar incluso terrenos de Aena.

Una estafa estaría detrás de este fenómeno, según denuncian los vecinos de la zona: una empresa cobra cinco euros al día -siempre en efectivo y sin factura- por coger el vehículo en la terminal y aparcarlo en un párking que, supuestamente, tiene todas las garantías. Sin embargo, los coches terminan a la intemperie y, en muchos casos, multados.

"Isto xa leva pasando tres anos, pero coa Semana Santa desbocouse: os aparcamentos legais están completos e esta xente aproveitouse, aparcando coches en fincas privadas e públicas, en rúas e ata en aceras", explica a Quincemil un vecino de la zona.

Vehículos en las inmediaciones del aeropuerto de Santiago (Cedida).

Esta empresa habría empezado a desarrollar sus servicios de la forma habitual: alquilando fincas en las que dejar los vehículos. En un momento dado los propietarios dejaron de arrendarlos, tras lo que estos terrenos llegaron a ser precintados, aunque los habrían roto para seguir utilizándolos.

Finalmente, esta empresa empezó a utilizar para dejar los vehículos espacios que no estaban habilitados para ello. Eso sí, su compromiso era devolver el coche tal y como se había recibido después de estar, en teoría, en un aparcamiento cerrado y videovigilado.

Vehículos en las inmediaciones del aeropuerto de Santiago (Cedida).

Tanto desde Aena como por parte de vecinos y propietarios de otros negocios del sector se ha denunciado la situación, aunque hasta ahora tan solo se ha sustanciado con la imposición de multas a algunos vehículos, que tan solo pueden ser retirados si obstruyen la circulación.

De hecho, los concelleiros de Mobilidade y Medio Rural, Gonzalo Muiños y José Manuel Pichel, se reunieron este martes con algunos de los afectados, con quienes se habrían comprometido a convocar a los tres cuerpos policiales -Policía Local, Policía Nacional y Guardia Civil, todos ellos con competencias en diferentes puntos de la zona- para abordar la situación.

Vehículos en las inmediaciones del aeropuerto de Santiago (Cedida).

Los aparcamientos legales que operan en las inmediaciones del aeropuerto no están viendo afectado su negocio, ya que estaban completos de cara a Semana Santa, aunque sí están sufriendo un daño reputacional y, en algunos casos, son ellos los que reciben las quejas de los clientes.

El problema, en todo caso, parece de difícil solución: mientras no se pueda probar que existe una estafa, las fuerzas del orden tan solo pueden poner multas que terminan pagando los usuarios sin posibilidad de recurrirlas.