Vista general de la primera jornada del juicio por el accidente ferroviario de Alvia

Vista general de la primera jornada del juicio por el accidente ferroviario de Alvia Álvaro Ballestero-EP

Galicia

Juicio Alvia: Cortabitarte y el maquinista renuncian a su derecho a la última palabra

Sus defensas han expuesto sus informes para pedir la absolución y el caso ha quedado visto para sentencia, que se espera en la primavera de 2024

27 julio, 2023 14:24

10 meses después el caso por el accidente del tren Alvia queda listo para sentencia. 10 años y tres días después de aquel 24 de julio de 2013, en el que 80 personas perdieron la vida y otras 145 resultaron heridas en uno de los siniestros ferroviarios más destacados de la historia de España, los acusados y sus defensas han expuesto sus razones para la absolución ante la jueza Elena Fernández Currás.

En una sesión que ha durado horas, el día comenzó con una pequeña protesta de las víctimas a las puertas del edificio CINC de la Cidade da Cultura. Fue en ese momento cuando se dieron los pocos momentos tensos de la jornada, cuando este grupo increpó a Andrés Cortabitarte a su entrada. Ante la jueza estaban sentados ambos acusados, el maquinista, Francisco Garzón Amo, y el ex dirigente de seguridad de Adif, Andrés Cortabitarte, apenas un mes después de estar juntos para escuchar las conclusiones.

Víctimas y familiares atendiendo a medios en el último día del juicio por el accidente del tren Alvia

Víctimas y familiares atendiendo a medios en el último día del juicio por el accidente del tren Alvia

Hoy sus defensas han tenido al oportunidad de dar la última palabra. La defensa de Cortabitarte ha sido la primera en intervenir para denunciar la "hipérbole" en la que se ha convertido el juicio, al señalar únicamente al ex dirigente de Adif y no a responsables de Renfe, técnicos de seguridad y otros implicados en la evaluación de riesgos de la infraestructura. "35 imputaciones de Adif y solo dos de Renfe", precisó, a la vez que también ha indicado que no han llamado a miembros del Ministerio de Fomento, encargados de "dar por buenas" las condiciones de la línea.

Igualmente ha señalado como último responsable del accidente al maquinista, que tuvo una conducta "anómala e inusual". "Todo en Adif y todo en Renfe se ha hecho bien excepto la conducta del maquinista", sentenció.

El abogado defensor ha hecho referencia a la complejidad de imputar los cargos a Cortabitarte, señalando que  la gente "no se sabe de qué se le está acusando", pero que aún así se le erige como "una especie de Cid Campeador de todo el sistema ferroviario". El letrado ha insistido que el acusado "no merece ningún reproche legal" y que ha actuado "siempre dentro del riesgo permitido" y sin infringir el "deber de cuidado".

En el tramo final de su intervención el letrado ha cargado duramente contra el maquinista por su comportamiento "anómalo, inusual e insólito" durante la llamada de 100 segundos con el interventor. Entre otras cosas también le ha acusado de "hacer caso omiso" a las señales, cartelones además de circular al doble de la velocidad permitida mientras accionaba el pedal del hombre muerto para impedir que "saltara el freno de emergencia". Fue durante estos instantes en el que se puso ver a un Francisco Garzón negando con la cabeza y al borde de las lágrimas.

"Si hubiera frenado cuatro o cinco segundos antes, si hubieran sido 95 o 96 segundos, el tren no hubiera descarrilado", expuso, haciendo referencia a la primera declaración de Cortabitarte, donde ya había indicado que esos cuatro segundos habían marcado la diferencia en el siniestro.

Finalmente, hizo referencia a los afectados, señalando que habían sido "doblemente víctimas" por no solo las "pérdidas irreparables" de aquel 24 de julio de 2013, sino también porque "han vivido este proceso hiperbólico " y "han visto como se alargaba innecesariamente" en busca de una acusación otra aparte del maquinista.

La defensa de Garzón se centra en el "relato" de culpabilidad hacia el maquinista

Tras poco más de una hora de exposición le llegó el turno a la defensa del maquinista Francisco José Garzón Amo. Su letrado ha querido incidir en el "relato" impuesto por Adif en el que el único culpable es el conductor del tren, en realidad una "víctima" más del siniestro.

El abogado defensor ha defendido que el acusado ha hablado "libremente desde el mismo instante en que se produjo el siniestro" y que desde entonces ha tenido una línea "coherente y real". Sin embargo entonces, argumentó, se han "retorcido" sus palabras por parte de los "responsables del siniestro, apra crear apariencia de infracción".

El accidente, señaló el abogado, fue consecuencia de una "falta de análisis y mitigación" de los riesgos, así como una "falta" de señalización adecuada, el "deficiente" cuadro de velocidades máximas y la también deficiente formación del maquinista.  Destacó que la línea ferroviaria entre Ourense y Santiago fue puesta en servicio en "condiciones inseguras de explotación", cuando Adif era el responsable de garantizarlas.

La decisión de retirar la acusación a Cortabitarte por parte de fiscal también fue criticada por el abogado defensor de Garzón. El letrado afeó al fiscal "omitir" que el maquinista era trabajador de Renfe y que "tiene unos derechos laborales". En este sentido apuntó que era un "clamor" de los empleados de la operadora la peligrosidad de la curva.

El maquinista Francisco Garzón en la última jornada del juicio

El maquinista Francisco Garzón en la última jornada del juicio

Insiste la defensa del conductor que la "obligación de realizar una evaluación de riesgo no nació en julio de 2010", sino que es algo que lleva presente desde el 2004. Criticó que Adif se escude en que es un riesgo exportado cuando el peligro de exceso de velocidad en una curva "solo Adif puede controlarlo".

La "obligación de realizar una evaluación de riesgo no nació en julio de 2010", sino que "existe desde la directiva de seguridad" de 2004, según ha advertido.

Y "no es una solución decir que exporto el riesgo y ya está", toda vez que el peligro de exceso de velocidad en una curva "solo Adif puede controlarlo".

"Adif ni evaluó ni gestionó el riesgo intolerable. Esta es la causa raíz del accidente. Siendo previsible el error humano de cualquier maquinista", ha sostenido.

"Adif ni evaluó ni gestionó el riesgo intolerable. Esta es la causa raíz del accidente. Siendo previsible el error humano de cualquier maquinista".

En una intervención que duró más de dos horas, y con un descanso de 30 minutos, la defensa de Garzón desgranó todas las razones y momentos que llevaron al conductor del tren hasta el siniestro. Ante los presentes en al sala, el letrado hizo referencia a la carta del jefe de maquinistas, Iglesias Mazairas, advirtiendo sobre el peligro de la curva una denuncia "premonitoria y prescriptiva del accidente".

Defendió que, tal como le ocurrió a Garzón el 24 de julio de 2013, lo mismo le podría haber ocurrido "a cualquier trabajador" de la línea. "No es si podría ocurrir, sino cuando", argumentó el letrado sobre el siniestro.

Tanto Andrés Cortabitarte, ex dirigente de Adif, como el maquinista Garzón Amo, han renunciado a su derecho de la última palabra en la última jornada del juicio. La jueza Elena Fernández Currás ha querido agradecer en sus últimas palabras tanto a los abogados como a los funcionarios de justicia que han trataré de estar a la altura participado en el proceso de más de diez meses. La magistrada ha dejado el caso visto para sentencia, que se prevé esté finalizada en primavera de 2024. "Trataré de estar a la altura", concluyó.

A la salida del juicio las víctimas volvieron a increpar a Cortabitarte que "tenía las manos llenas de sangre", mientras eran flanqueadas por un grupo de Policías Nacionales.