La mascarilla dejará de ser obligatoria en hospitales y centros sanitarios el próximo martes, 30 de enero. La Xunta de Galicia ha decidido ajustar los criterios técnicos de la norma de forma que sí se mantendrá en ciertos servicios como las urgencias, en los Puntos de Atención Continuada (PAC) y en espacios con pacientes inmunodeprimidos.

La decisión se ha tomado de acuerdo con los informes que maneja la Xunta de Galicia, con fecha del 21 de enero, sobre la vigilancia de la gripe en la comunidad, según ha explicado el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña en un acto en Nigrán. Así, el nivel de intensidad de la gripe ha bajado de forma que las consultas en atención primaria relacionadas con esta enfermedad han disminuido un 47% respecto a la anterior semana. Dicho descenso se ha vivido en las 4 provincias.

La tendencia a la baja se constata en todos los grupos de edad con una media de positios del 10%. Esto supone un descenso a la mitad sobre los resultados de la anterior semana (20,1%). El número de ingresados por gripe el 21 de enero alcanzaba las 103 personas; un 63% menos que la semana previa.

En lo que va de temporada de gripe se han notificado 3.071 ingresos a causa de la gripe, 161 de ellos terminaron en la Unidad de Cuidados Intensivos. En lo tocante al covid el número de casos activos es de 508 estando 7 en la UCI y 113 en unidades de hospitalización.

Sanidad impuso a las comunidades la obligatoriedad

La mascarilla en hospitales y centros de salud ha sido obligatoria en Galicia desde el pasado 10 de enero, cuando el ministerio de Sanidad impuso la medida tras no llegar a un acuerdo con las comunidades autónomas. "Después de la pandemia sufrida, hemos aprendido y no nos resignamos a las cifras pre-pandemia. Desde este Ministerio, vamos a seguir trabajando para minimizar los riesgos y homogenizar la protección de la salud", justificaba la ministra de Sanidad, Mónica García.

El consellerio, Julio García Comesaña, tachó la medida de "desproporcionada". El titular de Sanidade entendía tal aplicación en las comunidades "que lo precisan", pero no de forma generalizada. Al igual que sus homólogos, ha reclamó que cualquier medida al respecto se base en "criterios técnicos"