Sumar ha fracasado en las elecciones al Parlamento de Galicia. La formación de Yolanda Díaz ha enfrentado su primera prueba electoral en términos autonómicos y se ha dado de bruces. Sumar Galicia se queda fuera del Parlamento como sexta fuerza por detrás del PP, BNG, PSdeG, DO y Vox. Sumar tan solo ha conseguido un 1,90% de los votos, lo que se traduce en 28.171 papeletas. El mínimo necesario para tener representación es del 5%.

El partido es la primera vez que se presenta a los comicios en Galicia. El espacio político con el que podría compararse por afinidad política es Galicia en Común, que en 2020 obtuvo un 3,9% de los votos. Son unos resultados pésimos para el partido liderado por la gallega Yolanda Díaz, que ha sido derrotada en su propia casa; puesto que su carrera política nació y avanzó en buena parte en la comunidad.

Las ciudades llamadas a poder dar algún tipo de representación a Sumar eran Vigo y A Coruña. Sin embargo, ambas han concentrado el voto de izquierdas en el BNG y, por detrás, en el PSdG. Los resultados de la formación rosa no se han acerado ni siquiera a las previsiones de las encuestas —algunas de ellas le daban 1 o 2 escaños, pero otras muchas bajaban su representación al 3%—.

Resultados "malos" y "sin paliativos"

"Non é unha noite fácil, os resultados non son os esperados, son unhos malos resultados, sen paliativos", ha dicho Marta Lois tras conocer los resultados. Dijo que sendo honesta no se esperaba esos resultados y justificó el momento con que "partíamos de cero, e creo que nos faltou tempo".

Yolanda Díaz, por su parte, se manifestó a través de la red social X, en la que reconoció que los resultados de este 18-F son "malos" y lamentó no haber logrado el cambio en la Xunta. La dirigente no arropó a Lois en Santiago de Compostela.

Comparativa con las generales

El caso de la comunidad gallega también compromete el liderazgo de Sumar en el resto de España. Actualmente la formación es la tercera fuerza en el Congreso de los Diputados, pero porque actúa como paraguas de otras 15 formaciones. El resultado de las gallegas parece indicar que, de repetirse en otras comunidades la tónica del 18F, Sumar no tiene un recorrido suficiente en las comunidades y municipios como para obtener un papel tan significante como en la Cámara Baja.

El pasado 23J la formación alcanzó 178.691 votos en Galicia. Esto supone un 11,1% que se materializó en dos diputados por Pontevedra y A Coruña; Verónica Martínez Barbero y Marta Lois, respectivamente. Esta última, mano derecha de Díaz, llegó a tomar la portavocía del partido en la Cámara, pero renunció a ella y al escaño en orden a centrarse en la campaña gallega.

Así, Sumar no ha logrado revertir el hundimiento de Galicia en Común-EU-Anova las pasadas elecciones rozando el 4% con 51.223 votos. Así, la potencia de izquierdas en Galicia vuelve a concentrarse en BNG y PSdeG.

Tampoco queda nada ya de las Mareas, movimiento del que viene Marta Lois y que le llevó a ser concejal de Igualdad, Desarrollo Económico y Turismo en Santiago de Compostela bajo la alcaldía de Compostela Aberta. Precisamente el que fuera su alcalde, Martiño Noriega, apoyó al BNG en estos comicios con el sello Anova. Sin embargo, antes cerró la puerta a cualquier acuerdo con Sumar, que le ofreció ser candidato.

Falta de tiempo y medios

La convocatoria de elecciones para el 18F cogió con el pie cambiado a Sumar, que no había comenzado su proceso de escucha y/o formación en Galicia. Desde las filas internas del partido ya asumían que la cita con las urnas llegaba en un momento complicado que dejaba poco margen para formar y consolidar una candidatura.

El partido de Díaz aceleró y fichó a viejos conocidos de la política gallega como Juan Díaz Villoslada, concejal del PSOE en A Coruña durante parte del primer mandato de Inés Rey, entre otros. Asimismo, intentaron llegar un acuerdo con Podemos e IU, pero finalmente no se produjo ante el ‘no’ de las bases moradas. Bajo ese escenario, y con el rechazo también de Anova, tuvieron que conformarse con Esquerda Unida.

El 23 de marzo asamblea de Sumar

El resultado en Galicia empaña con este varapalo electoral también la primera asamblea de Sumar, que se celebrará el 23 de marzo. La cita tiene como objetivo continuar consolidando un frente amplio con la sociedad civil en alianza con partidos progresistas.

Por último, Sumar también debe afrontar las próximas elecciones vascas. Todavía no tienen fecha, pero donde también puede palparse una fractura con Podemos. Por el lado contrario Bildu continúa consolidándose e intentando crecer en Euskadi.