LUGO, 2 Feb. (EUROPA PRESS) –

Agentes de la Policía Local de Lugo han detenido a un vecino de la ciudad, de 38 años de edad, como presunto autor de un delito de atentado contra agentes de la autoridad, amenazas y daños en mobiliario, después de enfrentarse de forma agresiva con el personal de un centro sanitario que se negó a darle unos medicamentos.

Según han informado fuentes policiales, los hechos ocurrieron a primera hora de la mañana del martes, cuando el 092 recibió un aviso para acudir al PAC de Fingoi ya que en su interior había un varón en actitud muy agresiva. Los agentes fueron informados de que este hombre se había presentado en el centro sanitario solicitando que le dieran medicamentos prohibidos y, al negárselos, comenzó a ponerse muy agresivo, amenazando de muerte al personal facultativo y rompiendo el mobiliario del PAC.

Los policías identificaron al sospechoso, que seguía gritando y que comenzó a amenazar también a los agentes, a los que dijo que les iba a "cortar el cuello", o que iba a "coger una pistola" y pegarles "cuatro tiros". De hecho, llegó a abalanzarse sobre uno de los funcionarios, al que golpeó en un brazo. Por estos hechos, fue reducido e inmovilizado para proceder a su detención, por los delitos de atentado contra agentes de la autoridad, amenazas y daños.

Golpes en la puerta y amenazas a vecinos

Por otra parte, en la tarde del martes, la Policía Local de Lugo acudió también a un edificio de la calle Paxariños, por la presencia de un hombre que estaba golpeando la puerta de una vivienda y amenazando a los vecinos del inmueble. Al llegar, los agentes localizaron al sospechoso, un varón de 56 años de edad, e intentaron tranquilizarlo, pero el hombre no dejaba de bracear y gritar, y lanzó varias patadas a uno de los agentes.

Tras reducirlo, los funcionarios lo escoltaron escaleras abajo del edificio y, en un momento determinado, el hombre propinó un empujón a uno de los policías, que tuvo que ser agarrado por sus compañeros para no precipitarse por el hueco de la escalera desde una altura de un tercer piso. El hombre acabó detenido por atentado contra agentes de la autoridad y la Policía comprobó también que había amenazado de muerte y cogido por el cuello a una persona de edad avanzada que vive con él en ese mismo edificio.