Consecuencias del paro del transporte: Así afecta a hostelería, alimentación y pesca en Galicia

Consecuencias del paro del transporte: Así afecta a hostelería, alimentación y pesca en Galicia

Economía

Consecuencias del paro del transporte: Así afecta a hostelería, alimentación y pesca en Galicia

Hablamos con tres profesionales de sectores diferentes a los que el paro de los transportistas ha entorpecido su actividad diaria: un hostelero de Santiago, una tienda de alimentación de A Coruña y un pescador de Vigo

26 marzo, 2022 06:00

El paro del transporte está afectando cada vez a más sectores de la economía. La pesca, la hostelería, la alimentación, la industria… son solo algunos de los sectores que han visto entorpecida su actividad, e incluso paralizada en algunos casos.

El acuerdo con el Gobierno no ha convencido a los convocantes de esta parálisis. La Plataforma Nacional en Defensa del Transporte ha decidido mantener el paro de transportistas que comenzó el pasado lunes 14 de marzo. ¿Hasta cuándo? ¿Se retomará en cierta medida la actividad del transporte? La incidencia que este paro tenga en los próximos días todavía se desconoce, lo que sí se sabe es la repercusión que ya ha tenido durante todas estas jornadas anteriores.

Para conocer cómo han ido estos últimos días, hablamos con tres profesionales de varios sectores que nos cuentan las consecuencias que están sufriendo en su actividad diaria debido al paro de los transportistas. Esta es la situación que vive un hostelero de Santiago, un propietario de una tienda de alimentación en A Coruña y un pescador de Vigo.

La terraza de un bar, en la Praza do Obradoiro de Santiago de Compostela.

La terraza de un bar, en la Praza do Obradoiro de Santiago de Compostela. César Arxina – EP

La hostelería, un sector que ya venía arrastrando dificultades desde hace dos años, con los constantes cierres derivados de la pandemia. En un momento en que empezaban a levantar cabeza y a ver el año con esperanza, la inflación y el paro de los transportes ha vuelto a poner en jaque esa recuperación.

En este contexto, una parte del sector ha decidido convocar un paro el próximo lunes para exigir una solución a su situación: denuncian que, con la subida de precios, el sector está pasando de una falta de liquidez a una falta de solvencia, el paso anterior a la quiebra definitiva.

"Estamos en una situación límite: ya llueve sobre mojado y las subidas de energía y combustible nos afectan directamente; tendremos que repercutirlo en los precios, pero los clientes también están perdiendo poder adquisitivo", explica Lois Lopes, presidente de Hostalaría.gal, una de las asociaciones convocantes del paro.

En restaurantes como el compostelano A Horta do Obradoiro el sobrecoste está siendo del 15% al mes, a lo que hay que sumar las subidas que se han encontrado en la última semana y media en el mercado: hay menos oferta de pescado y verduras, por lo que los precios se disparan.

"No subimos los precios, pensamos que esto es una burbuja que tendrá que bajar y estamos conteniéndolos hasta que la situación se estabilice, mientras tanto intentamos adaptarnos", explica Kike Piñeiro, chef del restaurante junto a Eloy Cancela.

En este sentido, al trabajar con producto de proximidad la adaptación es más fácil: no han llegado a notar una falta de suministros, aunque determinados productos tienen precios fuera de de mercado. "La caballa, por ejemplo, está desorbitada, pero es su temporada y nos gusta trabajarla, así que la compramos igual", relata.

Así, Piñeiro espera que se encuentre una solución para el paro de los transportes, aunque tiene la esperanza de que el hecho de que parte de la flota haya vuelto a faenar empiece a devolver los precios a valores normales. La subida de los costes, sin embargo, preocupa más.

"Es insostenible seguir así, la situación no puede prolongarse más: si subimos los precios los clientes no vendrán o vendrán menos, ya que también tienen más gastos y la hostelería es de lo primero de lo que prescinden", lamenta.

"Yo no me puedo arriesgar todavía a hacer envíos fuera"

Empanada de la Empanada Viajera.

Empanada de la Empanada Viajera. CEDIDA

Las panaderías y tiendas de alimentación también ha sufrido las consecuencias del paro del transporte. La falta de abastecimiento de productos obligó al cocinero Pablo Pizarro, del obrador de la Empanada Viajera, a tener que buscar alternativas para conseguir ingredientes básicos para sus empanadas, como la cebolla chata del país. Al no poder acceder al mercado coruñés de frutas, este profesional se vio obligado a desplazarse a Betanzos y buscar otros proveedores que, al menos de manera puntual, le suministrasen este ingrediente que no puede faltar en sus empanadas.

El aceite de girasol también es un básico en sus elaboraciones. Por suerte, dice, "acababa de comprar un palé", pero ya es consciente de que la próxima vez que vaya a comprar este aceite lo pagará al doble de precio. El amarre de la flota y el paro del transporte provocó escasez de pescado en la lonja y los mercados. La propuesta estrella de la Empanada Viajera es la empanada de xoubas: "Los clientes se quedaron sin ella porque no había xoubas".

Y donde también ha notado la afección del paro del transporte es en el servicio de envíos. Pizarro ha tenido que limitarse a realizar envíos a sus clientes de A Coruña, y así lo seguirá haciendo hasta que vea que vuelve a imperar la normalidad en el transporte. "Yo no me puedo arriesgar todavía a hacer envíos fuera", asegura Pizarro, quien teme que al ser un producto no perecedero no llegue a destino y después "ya no sirva para nada", lo que le acarrearía pérdidas.

Las perdidas que todo este conflicto le han ocasionado a su negocio, Pizarro prefiere no calcularlo. En cualquier caso, aunque reconoce que durante todos estos días está dejando de vender productos a muchos clientes, bien es cierto que la mayoría son clientes fijos y que retomarán sus pedidos en cuanto el paro del transporte no impida el desarrollo normal de la actividad de negocios como el de Pablo Pizarro.

"Empezaría a haber escasez de algunos tipos de pescado

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El sector pesquero, uno de los motores principales de la economía gallega, también se ha visto afectado en mayor o menor medida por la situación actual. Un representante de la Cofradía de Pescadores de Vigo, asociación que aglutina a trabajadores dedicados a la marisquería, a las artes menores y a la pesca de cerco, reconoce las complicaciones.

"El precio del gasóleo ha subido mucho, casi no se puede afrontar la actividad con los precios de hoy en día", declaran desde la Cofradía viguesa. Este es el principal problema al que se enfrentan los pescadores: "Un barco de estos consume mucho combustible y llenar el depósito al completo supone mucha diferencia de dinero con respecto a hace un par de meses".

La consecuencia directa del encarecimiento del gasóleo ha sido la paralización de la salida al mar. Las embarcaciones de la Cofradía llevan a cabo la pesca costera artesanal en vez de las técnicas de arrastre. Es decir, son barcos de tamaño reducido que suelen faenar diariamente en zonas cercanas.

"Nuestros barcos estaban parados hasta ahora, como cada año, para labores de mantenimiento", explica el representante de la Cofradía de Pescadores de Vigo, "Pero lo que han hecho es prorrogar la salida. La gran mayoría están parados". En principio, retomarán la actividad la próxima semana.

Otro de los problemas al que se enfrenta el sector pesquero es el paro de los transportistas, que dificulta la puesta en venta del producto. "O no hay transporte o hay poco y no se arriesgan a no llegar a su destino", afirman desde la Cofradía. De prolongarse la situación, "empezaría a haber escasez de algunos tipos de pescado, sobre todo en las zonas alejadas de la costa".

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, se reunió el pasado miércoles (23 de marzo) con representantes del sector y anunció un paquete de medidas para limitar al máximo el impacto del coste del gasóleo en la cuenta de explotación de la flota pesquera. Estas declaraciones han logrado que los pescadores desconvoquen la huelga que tenían planificada.

En resumen, la demanda principal del sector, en palabras del representante de la Cofradía de Vigo, es "disminuir el coste de la salida de un barco, pues el consumo es grande y no se sabe cuándo pararán de subir los precios". Ante este panorama, la industria pesquera espera mejoras y resiste en activo en la medida de lo posible.

*Artículo elaborado por Uxía Miranda, Carlos Rey y Loreto Peteiro