Poemario de ansiedad: la poesía y la ilustración se fusionan de la mano de dos coruñeses
La escritura de Ramiro Rodrírguez (Perdy) y los trazos de Estefanía Fragoso protagonizan una obra nacida durante el confinamiento como terapia contra los problemas de ansiedad del autor
31 diciembre, 2020 06:00Poesía e lustración se unen en ‘Poemario de ansiedad‘. Esta obra que fusiona los poemas de Ramiro Rodríguez (Perdy) con ilustraciones de Estefania Fragoso ha visto la luz hace apenas una semana. Estos dos coruñeses, con dotes para la escritura y el arte ilustrado, dan forma a un libro con el que Perdy busca dejar atrás sus problemas de ansiedad.
Palabra e imagen se entremezclan en las páginas de esta publicación que nace a raíz de la ansiedad que padece su escritor. Informático de profesión, Perdy, quien también se atreve con la música, empezó a escribir "a modo de terapia" para tratar de controlar los problemas de ansiedad arrastrados durante años y agravados por un despido laboral.
"Leo mucha poesía pero nunca me decidí a escribir", comenta Perdy, quien aprovechó el confinamiento domiciliario, en la primera ola de pandemia, para dedicar horas del día a una de sus pasiones: la poesía. "Empecé a escribir a modo de terapia", confiesa este poeta recién nacido que encontró en la escritura una vía de escape a sus problemas.
"Escribir es mejor que las pastillas. Mientras escribo me siento entretenido y alejado de cualquier trastorno", afirma este escritor novel que refleja en sus poemas las sensaciones que uno tiene cuando atraviesa un episodio de ansiedad. "Hay textos que hablan de sufrimiento pero también hay otros que abordan momentos de alegría, de escape de esos momentos más duros", señala Perdy, quien está seguro de que "casi todo el mundo se va a poder sentir identificado" con lo que dicen sus textos.
Un texto, una imagen
La letra de Perdy se apoya con las ilustraciones de Estefania Fragoso, una licenciada en Bellas Artes que no dudó ni un momento en sumarse a la aventura artística de su amigo. "Lo más complicado fue lograr crear ilustraciones que se alejasen de la obviedad", dice Estefania, quien nunca antes se había enfrentado al reto de ilustrar poemas: "Me lo he pasado fenomenal".
El libro está compuesto de un total de 65 poemas acompañados de 17 ilustraciones. De entre todas ellas, hay una ilustración de la que Estefania se siente especialmente orgullosa por su nivel de dificultad. Se trata del poema de Los Elegidos, un texto que aborda la pederastia eclesiástica.
Reflejar con una imagen un tema tan delicado no resultó sencillo, pero esta ilustradora consiguió trazar un diseño a la altura del texto. Y lo hizo, dibujando un gran botafumeiro de cuyas rendijas asoman pequeñas manos, dando la sensación de que en su interior hay niños encarcelados.
Esta obra conjunta de este par de amigos es solo el principio de una saga literaria y artística surgida durante el confinamiento. "No he parado de escribir", asegura Perdy, que ahora que ha sacado el poeta que lleva dentro no tiene intención de dejar de crear literatura.