Alerta en el Orzán, el libro-delirio coruñés que surgió en el confinamiento
José Luis Ducid envió cada noche un texto a través de WhatsApp a sus amigos, que lo animaron a publicar este proyecto multidisciplinar
28 agosto, 2020 06:00El confinamiento dio para muchas historias. Algunas de ellas se han perdido con el tiempo, pero hay otras que quedarán grabadas en la posteridad. Es el caso de los relatos que José Luis Ducid enviaba a sus amigos y conocidos cada noche a través de WhatsApp.
Aquella historia fue evolucionando y encontrando colaboradores espontáneos hasta que se convirtió en Alerta en el Orzán un libro, "o un delirio", que recopila esta historia y la amplia con ilustraciones, un álbum de cromos o piezas audiovisuales. Ahora, han conseguido su objetivo de financiación en Verkami, donde todavía se pueden adquirir ejemplares y colaborar con la campaña.
"Fue un acto espontáneo, uno de los beneficios secundarios de la COVID-19" bromea José Luis. "Alerta en el Orzán es un compendio de cosas. Podrías prescindir de leerlo y funciona igual. Nos juntamos al calor de unos textos que yo enviaba cada mañana. Un relato diario que escribía en el ático en el que malvivo", cuenta el autor.
Fue su hermano quien les dio una mayor difusión. "Mi hermano quiso publicarlo en su Facebook. Tuvo mucha recepción. Empezó a ocurrir algo sorprendente. La gente modificaba lo que escribía, mandaban fotos, textos y dibujos", cuenta. Finalmente, Alerta en el Orzán se convirtió en un "gran relato colectivo".
Más que un libro
Alerta en el Orzán cuenta la historia de un alter ego de José Luis Ducid. "Se trata de un escritor politoxicómano que vive una serie de aventuras durante su encierro. Es una tragicomedia", cuenta.
El barrio en el que suceden los hechos también es importante a nivel argumental. "Es una zona despreciada y empobrecida, a cien metros de una de las principales avenidas de la ciudad. Un barrio obrero que se convirtió en zona de prostíbulos. La puerta de un baño, donde se escriben cosas incofesables. En definitiva, el lugar donde la gente hace las cosas que no se atreve a hacer en San Andrés", dice.
El personaje principal tiene virtudes y poderes. "Puede ir por la calle sin mascarilla, ir a visitar al camello…", dice el autor.
Un trabajo colectivo
No solo José Luis Ducid participó en esta experiencia, sino que más personas se unieron a la causa con el tiempo. Pablo Rega se encargó del apartado audiovisual de apoyo que se publicó en YouTube, Alvaro Dorda creó una ilustración incluida en el libro, Inés Taboada se ocupó de los resúmenes visuales que hay a lo largo de la historia, Cristina Tobio de la producción y David Carballal como editor, diseñador e ilustrador.
"Yo publicaba los textos en Facebook y la gente empezó a animar para que lo pasásemos a papel. Fue apareciendo gente espontánea que quería colaborar", afirma Álvaro. "Mi ilustración es un resumen del universo creado por José Luis. Hay en ella insertos de cada capítulo", cuenta.
El resto del apartado gráfico se apoya en Inés Taboada. "Fue algo complicado. Tuve suerte porque tenía tiempo durante el confinamiento para trabajar en ello. El libro se divide en tres partes y yo hago un collage cada 15 capítulos con imágenes cedidas, textos a mano e ilustraciones. Es algo atractivo y potente", señala Inés, que también es autora de la portada y contraportada.
"Nadie se imagina lo que debemos agradecer a la gente su apoyo. Pagaron en este contexto tan pesimista", agradece su autor, en referencia a quienes participaron en la campaña de micromecenazgo. A mediados de septiembre se entregará el libro y parte de los beneficios serán para la Cocina Económica.