La gallega Julia Otero da una lección sobre su enfermedad en El Hormiguero y bate récords

La periodista gallega Julia Otero, popular por su programa radiofónico ‘Julia en la onda’, al que ha regresado recientemente tras meses de parón al haber anunciado que padecía cáncer, visitó ayer El Hormiguero de Pablo Motos batiendo récords de audiencia. Su regreso a la vida pública era muy esperado por compañeros de profesión y seguidores, que dieron una impresionante respuesta a la entrevista de Motos convirtiendo el programa de ayer en el más visto de la televisión con 2.872.000 espectadores y un 18,3% de share (más de seis millones de personas pusieron la cadena en algún momento de la emisión).

Su aparición en televisión no solo fue celebrada por los datos de audiencia, sino que también fue aplaudida por muchos debido a la lección que Otero ofreció sobre su enfermedad basándose en su experiencia personal. Antes de nada quiso dejar claro que "no quiere ser bandera de nada" y contó todo lo que le ha pasado con el corazón abierto y las emociones a flor de piel, tanto propias como del público. Durante la entrevista reconoció que "llegó a temblar de miedo" al recibir el diagnóstico de cáncer y dejó claro que se deben desechar comportamiento como "minimizar lo que le pasa a un enfermo o dramatizar".

En estos complicados casos aconsejó a los allegados de las personas afectadas que "les acompañen" y que "si no saben qué decir no digan nada y se limiten a estar". A continuación, ofreció una explicación magistral basándose en una metáfora sobre el desarrollo del cáncer, en la que relató que "hay células egoístas, inmortales y viajeras" y que "se dice que el cáncer dura cuatro o cinco años porque una de esas células a pesar de los tratamientos puede haber alcanzado el torrente sanguíneo, burlar el sistema inmunológico, llegar a otro órgano y producir metástasis".

"Hablamos de cáncer en paralelo a la vida"

"Estamos hablando de cáncer en paralelo a la vida", aseguró Motos durante su conversación con la periodista, a lo que ella respondió sobre las células causantes del cáncer que "ignoran que la muerte del huésped supone la suya propia". Sobre el proceso que ha llevado a cabo estos meses tras el mal diagnóstico derivado de una revisión rutinaria, pasando por el anuncio en las ondas (tan solo seis días después de conocer la noticia) y el tratamiento, Otero ha concretado que "escogió preguntar todo y no vivir en la ignorancia". "Me vino bien saber lo que hacía cada substancia que me ponían", aseguró.

"No sabes cómo reaccionar cuando llega", explicó Otero sobre la enfermedad, que recordó las "caras raras" de los médicos tras una colonoscopia que le realizaron. "Comprobé que se puede temblar de miedo, porque tras la noticia te entra la melancolía del futuro, te pasa la vida soñada por delante, los nietos que igual no llegas a conocer o la casa que no estrenarás", contó, a la vez que reconoció que tuvo que meditar bien como comunicar la noticia porque "al ser un programa de radio diario no podía ausentarse un año sin decir nada".

"Un spoiler que todos sabemos y que nadie quiere oír es que todos vamos a morir", manifestó la periodista durante la entrevista, una intervención en la que antes y después se llevó la admiración y respeto de los colaboradores del programa, del público presente y de los espectadores que la veían desde casa y sienten su recuperación como una victoria.