10 souvenirs típicos del Camino de Santiago

Santiago de Compostela y el Camino de Santiago son destinos emblemáticos que, cada  año, atraen a miles de peregrinos y viajeros de todas las partes del mundo. Según  datos de la Oficina de Acogida al Peregrino, sólo en 2022 más de 437.00 peregrino llegaron hasta la Plaza del Obradoiro.  

Un 54% de ellos fueron españoles, pero el otro 46% se reparte entre países vecinos como Francia o Portugal, y entre otros no tan cercanos como Corea, Brasil o Estados  Unidos. 

Peregrinos en la plaza del Obradoiro

Y es que estas tierras, cargadas de historia y espiritualidad, no sólo ofrecen un reto  físico y mental, sino que regalan a quienes las visitan una experiencia transformadora.  Es por eso que, una vez llegados a Compostela, todos buscan lo mismo: encontrar un  recuerdo que inmortalice lo vivido.  

Esto hace que en Santiago existan decenas de tiendas de souvenirs que permiten al  viajero llevarse un pedacito de la ciudad y del Camino. Estos son los 10 recuerdos que  más triunfan entre los peregrinos: 

1. Concha de peregrino  

La concha de peregrino es uno de los símbolos más reconocidos y apreciados del  Camino de Santiago. Este objeto se asocia directamente con la ruta jacobea y ha sido  utilizada durante siglos por los peregrinos para identificarse. 

La concha, generalmente hecha de vieira, empezó utilizándose para distinguir a  quienes habían concluido su peregrinación de quienes todavía seguían en camino.  Esta se entregaba a los peregrino al llegar a Santiago para que la colocaran sobre el  sombrero o la capa. Portar la concha de vieira era considerado como una forma de  tributo al Apóstol, como se indicaba en los textos del Códice Calixtino.

Hoy en día, la Concha sigue siendo una emblema del Camino, decorando bastones y  mochilas, aunque ahora son muchos las que optan por comprarla durante la caminata  para portarla durante su aventura.  

2. Camisetas del Camino de Santiago  

Las camisetas son una de las formas más populares de llevar un recuerdo del viaje.  Estas prendas suelen estar estampadas con símbolos del Camino, como la flecha  amarilla, la concha o el famoso logo de la ruta. 

Se trata de uno de los recuerdos más demandados, de ahí que la Plaza del Obradoiro  siempre esté repleta de estas camisetas. También es habitual ver grupos de peregrinos  vestidos con sus propias camisetas personalizadas.  

3. Parches para la mochila  

Los parches para la mochila son una forma de distinguir y adornar el equipaje. Estos  parches suelen llevar diseños relacionados con el Camino de Santiago, como el mapa  de la ruta, nombres de las etapas o símbolos representativos. 

Muchos peregrinos optan por comprar uno en cada etapa, de forma que al llegar a  Santiago sus mochilas ya lucen de colores. Otros, prefieren llevarse el parche al llegar a  la meta para poder sumarlo a otros muchos que han ido coleccionando en otros viajes.  

4. Imanes  

Los imanes son una elección popular entre los viajeros que buscan llevar un pequeño  recuerdo de cada lugar que visitan. En el caso del Camino de Santiago, los imanes suelen representar la Catedral de Santiago de Compostela y la famosa imagen del  Apóstol Santiago.  

Estos imanes son una forma de recordar el paso por Compostela y se pueden exhibir  fácilmente en la nevera u otras superficies metálicas. 

5. Pulseras de tela  

Las pulseras de tela son accesorios que se pueden encontrar a lo largo del Camino,  pero sobre todo en Santiago, donde abundan en todas las tiendas. Estas suelen tener  colores vibrantes y estar decoradas con la concha de peregrino, la flecha amarilla y  mensajes emotivos y de resiliencia. 

Se trata de un recuerdo muy recurrido entre los más jóvenes y entre aquellos que  deciden adentrarse en el camino en grupo, ya que la pulsera simboliza el vínculo  creado en el Camino. 

6. Bastones de peregrino  

Los bastones de peregrino son elementos indispensables para muchos caminantes.  Además de brindar apoyo y estabilidad durante el recorrido, estos bastones simbolizan  la tradición y el espíritu del Camino de Santiago. Muchos peregrinos decoran sus  bastones con conchas de vieira u otros adornos personalizados, convirtiéndolos en  objetos únicos.

Aunque lo más habitual es adquirirlos por el camino, hay quien opta por comprarlos al  llegar a Santiago como recuerdo del viaje.  

7. Llaveros  

Los llaveros se pueden encontrar en casi todos los destinos turísticos, y el Camino de  Santiago no es una excepción. Los llaveros del Camino a menudo presentan imágenes  icónicas como la concha de peregrino, la flecha amarilla o la imagen de la Catedral de 

Santiago. Son una forma práctica y simbólica de llevar contigo un pedacito de esta  experiencia y verla a diario, ya sea en las llaves o como adorno en la mochila. 

8. Matrículas  

Las matrículas del Camino de Santiago son objetos distintivos que muchos peregrinos  eligen como souvenir. Estas placas metálicas, similares a las matrículas de los coches,  suelen llevar grabada la frase "Camino de Santiago" junto con el año y el nombre del  peregrino. Se pueden colocar en la bicicleta, en la mochila o incluso en la pared de la  habitación a modo de decoración.

9. Figuras religiosas  

Dado el trasfondo espiritual del Camino de Santiago, las figuras religiosas son souvenirs  especiales para muchos peregrinos, y es que la religión es uno de los motivos que  llevan a más personas a hacer el Camino. 

Estas figuras incluyen imágenes del Apóstol Santiago, de la Virgen María y de otros  santos honrados por los católicos. Algunas tiendas de souvenirs, como A Rúa Recordos,  aseguran que “son los productos que más venden” y que “hay quien los reserva a  través de las redes sociales antes incluso de llegar a la ciudad”.  

10.Tarta de Santiago  

Por último, la tarta de Santiago es un emblemático postre que no puede faltar en esta  lista de souvenirs típicos. Este exquisito pastel de almendras, cubierto con azúcar glas  y decorado con la icónica cruz de Santiago, se encuentra en numerosas pastelerías y  restaurantes de la ciudad. 

Además de triunfar por su sabor, la tarta de Santiago triunfa como regalo, ya que evoca  los sabores y aromas únicos de la gastronomía gallega y deja un dulce recuerdo del  Camino.