Una virgen embarazada y un ángel con gafas: esta iglesia de Santiago esconde dos detalles únicos
Una de las diferentes iglesias encargadas por Diego Xelmírez durante su arzobispado en el siglo XII, esconde dos casos casi únicos en cuanto a la representación arquitectónica clásica de dichos personajes religiosos
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Son muchas las imágenes curiosas que a priori no encajan con el estilo arquitectónico o con el alma religiosa de iglesias, catedrales y pequeñas capillas alrededor del mundo. Concretamente, en Santiago de Compostela, hay una iglesia que destaca por un par de detalles en los que merece la pena fijarse.
Nos dirigimos a la Rúa Nova, y caminamos bajo casas lacadas sostenidas por grandes vigas y soportales en piedra hasta llegar al número 31, a la Iglesia de Santa María Salomé.
Si bien dijimos que eran dos los detalles que llaman la atención de este santuario, antes de llegar a él podemos echar la vista atrás en la historia y descubrir muchos más. Como que se dice que es la única iglesia construida en honor a la madre de Santiago Apóstol y San Juan Evangelista, pues la Biblia recoge que Salomé fue una de las mujeres que se encontraban al pie de la Cruz cuando Cristo fue crucificado, por lo que posiblemente sea madre de él y de su hermano. Otro dato histórico, es que fue aquí donde un 24 de junio de 1862 murió repentinamente la madre de Rosalía de Castro, doña Teresa de Castro y Abadía.
Historia aparte, si nos ubicamos frente a la fachada podremos ver con nuestros propios ojos un detalle casi único en el mundo.
Sobre la clave de la triple arquivolta del arco románico nos encontramos protegidas por el porche de piedra, con tres estatuas. En el centro, una imagen de la Virgen María sedente; en una de las columnas, el Ángel de la Anunciación; y en la otra columna, otra vez la Virgen María en estado de gestación, indicando el cumplimiento de las palabras de Gabriel.
La virgen embarazada posa sobre su vientre la mano derecha mientras que mantiene levantada la izquierda. ¿Saludando tal vez a todo el que pasa a ver este caso no único pero sí extrañísimo en la iconografía cristiana?
Aun siendo un caso poco habitual, no hay que irse muy lejos para ver otra representación, pues en el Museo de la Catedral también nos encontramos una estatua de la Virgen de la O. de 1,60 metros de altura. Según la investigadora e historiadora portuguesa Virginia da Silva, se trataría de el verdadero retrato de la reina Santa Isabel de Portugal, conocida como "Rainha Santa", uno de los personajes históricos más queridos del país vecino.
Pero antes de dirigirnos al Museo de la Catedral para hacer check en nuestra lista por haber visto dos vírrgenes embarazadas en un mismo día, entremos en la Iglesia de Santa María Salomé para seguir descubriendo.
Tras descubrir esta pequeña iglesia poco conocida para toda la belleza que alberga, nos fijaremos en el primer altar de la pared izquierda. Sobre el altar se apoya el retablo decorado con esculturas de diferentes caras, si las analizamos con atención veremos, tallado en madera y lacado en dorado... ¡Un angelito con gafas!.
¿Pero acaso los ángeles, esos espíritus celestes puros y perfectos creados por Dios para su ministerio, pueden tener algún defecto en la vista? Pues en esta iglesia de Santiago sí. Quién sabe si pacede miopía, hipermetropía, astigmatismo o simplemente tiene la vista cansada este angelito dorado que necesita gafas se ha convertido en un caso único que deja perplejos a amantes del arte, practicantes que frecuentan la iglesia y curiosos que se acercan hasta allí para verlo con sus propios ojos.