Era el año 2009 y Fernando Torres era una de las principales estrellas del fútbol mundial. Un año atrás había marcado el gol de España en la final de la Eurocopa ante Alemania y había quedado en tercer puesto en la lucha por el Balón de Oro, solo por detrás de Cristiano Ronaldo y Leo Messi.
Por estos motivos nadie entendió qué llevó a Torres a protagonizar un anuncio de la peluquería coruñesa Gessbra. Este negocio situado en Juan Flórez consiguió poner su nombre en boca de muchas personas gracias a la presencia del Niño en su campaña.
El spot publicitario, además, no cumplía los estándares de una producción nacional. En él, Fernando Torres presenta el negocio: "Os doy la bienvenida a la peluquería Gessbra, de mi amigo Juan Carlos". El anuncio dejó atónitos a los seguidores del futbolista, que no entendían porqué cedía su imagen a un negocio local.
Al principio, se sucedieron las especulaciones. No era la primera vez que se veía al delantero por la ciudad o la provincia, pues Olalla Domínguez, su mujer, es santiaguesa. Muchos asociaron el anuncio con alguna cercana amistad suya y de su pareja.
Sin embargo, después de este anuncio surgió otro. En esta ocasión, Fernando Torres promocionaba una escuela canina de Navalcarnero. El spot, de nuevo, roza el surrealismo. Tras este anuncio, las sospechas de que se trataba de una campaña encubierta crecieron.
Finalmente, se descubrió que estos dos spots y otro más de una escuela de tenis eran, en realidad, un teaser de una campaña del Banco Gallego. La desaparecida entidad fichó a Fernando Torres para promocionar su Depósito Amigo. "Si usted no tiene la suerte de tener un amigo famoso, ya tiene otra forma de aumentar sus ingresos", dice la voz en off del último de los spots.
La original campaña elevó la popularidad de esta entidad gallega, que pese a ello no pudo superar la crisis económica y terminó siendo comprada por el Banco Sabadell en el 2013. Para el recuerdo de todos siempre quedará que Fernando Torres, uno de los mejores futbolistas del mundo, promocionó la peluquería Gessbra, del número 93 de Juan Flórez.