Miguel Llorente se despide del Deportivo y acumula una segunda denuncia por racismo

La relación entre Miguel Llorente y el Deportivo finalizó de la manera que nadie esperaba el pasado verano. Avalado por una importante trayectoria en la cantera del FC Barcelona, el técnico aterrizaba en A Coruña con la idea de devolver al equipo a la élite del fútbol femenino. Once meses después abandona el club habiendo logrado la permanencia pero con dos denuncias de racismo presentadas en el canal ético del club.

El entrenador expresó el pasado martes su idea de continuar en el conjunto blanquiazul pero tras una reunión con los máximos responsables de la sección, ambas partes coincidieron en señalar que lo mejor era poner punto y final. El técnico asegura que "ha sido una temporada de mucho desgaste en el que teníamos como objetivo ascender y acabamos jugando las eliminatorias por no descender". Llorente explica que ha sido una "etapa corta pero intensa en la que me siento aliviado y agradecido al club y a la afición".

En su despedida también desveló un tema desconocido hasta el día de hoy. Llorente aseguró con naturalidad que se había presentado una nueva denuncia en el canal ético del club por una presunta actitud racista con la jugadora Charity Adule.

En alusión a este caso, Llorente contó que Adule no quiso salir a jugar a falta de cinco minutos para el final en el encuentro que enfrentó al Deportivo con el Pradejón y que esa misma semana se negó a participar en una tarea sin balón de una de las sesiones de entrenamiento. "Los que nos dedicamos a esto sabemos que es normal que tras un episodio como este, la jugadora quede desconvocada. Estoy tranquilo porque eso no es racismo ni nada similar, es fútbol", sentenció el entrenador.

De esta forma se pone fin a un proyecto que no terminó como se esperaba. Ahora el club planifica ya la próxima temporada con el objetivo principal de armar un bloque más compacto y unido para olvidar una temporada convulsa y con episodios extradeportivos complicados.