El Deportivo Juvenil hace historia y ya está en la final de la Copa de Campeones
El equipo blanquiazul derrotó por un tanto a cero a todo un Real Madrid gracias un gol de Fito al borde del descanso
24 junio, 2021 21:16Espectacular, histórico e impresionante. Podríamos pasar toda esta crónica definiendo el éxito logrado por el Dépor Juvenil tras eliminar al Real Madrid en las semifinales de la Copa de Campeones. Un gol de Fito fue suficiente para darle el pase a la final después de un encuentro muy serio y sufrido por parte de los coruñeses.
Los primeros minutos del partido nacieron con un Real Madrid dominador que merodeaba con peligro la meta de Brais. Tres disparos desde larga distancia se convirtieron en los primeros avisos del conjunto blanco.
El Dépor resistió y fue ganando presencia con el paso de los minutos. Nájera y Mella lo intentaban por las bandas y poco a poco se atrevían a hacer cada vez más cosas. El encuentro se igualó con un Dépor que era consciente de que necesitaba un gran despliegue físico para plantar cara al Real Madrid.
La pausa de hidratación no le sentó bien a los jugadores de Óscar Gilsanz y el Madrid volvió a apretar. Brais volvía a salvar al equipo y ya se convertía en uno de los jugadores más destacados del encuentro.
El Dépor maduraba el partido y aguantaba. Además al filo del descanso lograba adelantarse en el marcador gracias a la estrategia. Córner desde la derecha, prolongación en el primer palo y Fito en el segundo batía a Cañizares. Los deportivistas golpeaban para sorpresa de los aficionados que presenciaban el partido en Marbella.
Con este resultado los jugadores se marchaban a los vestuarios. La segunda mitad nació con un Real Madrid volcado que buscaba el empate. Brais volvió a aparecer con dos muy buenas intervenciones y a los blanquiazules se les empezaba a hacer largo el encuentro.
El partido se convirtió en un ejercicio de resistencia deportivista. Con líneas muy juntas y buscando las contras, el Dépor veía pasar los minutos y seguía aguantando. Así se llegaba al minuto veinte de la segunda mitad. Cada falta a favor de los blanquiazules daba oxígeno a unos jugadores que seguían dando la cara.
Los calambres y problemas físicos empezaron a aparecer en los jugadores blanquiazules. El Real Madrid seguía empujando pero los coruñeses aguantaban y cerraban líneas con gran inteligencia.
Así se llegaba al final de un descuento eterno en el que los coruñeses lograron pasar a la final contra todo pronóstico.