• El Deportivo jugará en Mérida el sábado 10 y recibirá al Pontevedra en Riazor el domingo 18

A pocas horas para el cierre del mercado la situación de Lucas Pérez no varía. El delantero lleva todo el verano forzando una salida hacia el Deportivo pero se ha encontrado con la negativa del Cádiz. El conjunto andaluz se cerró en banda desde el primer minuto y se remite a un pago muy alto por su traspaso o a que cumpla su año de contrato.

El deseo de Lucas era regresar a casa y ayudar al equipo de su ciudad a regresar al fútbol profesional. Durante la temporada llegó a un acuerdo verbal para salir hacia A Coruña en caso de que el equipo ascendiera a Segunda. El no ascenso no frenó sus intenciones pero se encontró con la negativa del presidente del Cádiz.

El conjunto andaluz ha cuajado un inicio de temporada pésimo con tres derrotas en tres encuentros. Lucas fue titular en los dos primeros y suplente en el último. Los silbidos de la afición cadista en el último encuentro no han cambiado la postura de un presidente que se cierra en banda.

En esa maniobra todos salen perdiendo. El Deportivo se queda sin un jugador que sería diferencial en la categoría y el Cádiz mantiene a disgusto a un futbolista con una de las fichas más altas de toda la plantilla. El vestuario cadista es un polvorín y el propio Álvaro Negredo dejó un recado el otro día nada más terminar el encuentro: aquí se tiene que estar al 100%.

La operación fallida obliga al Dépor a buscar otras opciones. Durante el verano se habló mucho sobre un posible regreso de Xisco Jiménez pero parece que no hay acuerdo económico entre ambas partes. Él último nombre es salir a la palestra es el de Max Svenson, futbolista del Espanyol que ocuparía plaza de sub 23.

Y es que para acometer algún fichaje senior, el club debe dar de baja a algún futbolista. Durante todo el verano Héctor Hernández ha estado en la rampa de salida pero ninguna oferta ha sido de su agrado. Quedan horas de mercado para que la plantilla del Deportivo quede configurada de forma definitiva.