"Imposible entender esta loucura", decía el impresionante tifo que se vio en Riazor antes de empezar el partido. La locura la acabó desatando Pablo Martínez que marcó el gol de una victoria que puede ser clave en la temporada ante el equipo que lideraba la Primera RFEF.

Los resultados del resto de la jornada acompañaban y los blanquiazules podían reengancharse a la pelea por el campeonato poniéndose a cinco puntos del líder, que ahora mismo es el Celta B.

El Nástic llegaba con ganas de demostrar que era el equipo más en forma de la categoría y así lo hizo en los primeros minutos de juego. Los de Tarragona arrancaron dominando el encuentro y Pablo Trigueros estuvo a punto de rematar un balón desde el punto de penalti.

Cuando el Dépor parecía que empezaba a controlar el balón, se llevó un buen susto. Andy Escudero robó un balón en medio campo, chutó y estuvo a punto de sorprender a Mackay. No sería el único sobresalto para la parroquia deportivista, ya que minutos después un centro del propio Escudero estuvo a punto de llegar a Jaume Jardí que estaba solo, pero Paris Adot cortó el balón cuando ya se mascaba la tragedia.

El peligro del Dépor llegaría por medio de Lucas Pérez. Primero con un disparo que Varo desvió a córner y después con un buen pase para Villares que el centrocampista remató fuera en la primera buena jugada de los de Idiakez.

El Nástic avisaría de nuevo con una jugada que terminó en gol, pero que sería anulado por falta a Pablo Martínez. Los catalanes protestaron la decisión al árbitro que vio muy de cerca la jugada.

La mejor ocasión del Dépor llegó en la última jugada de la primera parte. De nuevo la magia de Lucas Pérez apareció para pasar un buen balón a Hugo Rama que remató cruzado, pero Varo despejó con una buena parada.

El buen momento del Dépor continuó en la segunda parte con el equipo saliendo como un vendaval. Lucas Pérez tuvo dos oportunidades, una de ellas muy clara al quedarse solo delante del portero tras un buen pase de Ochoa, aunque el control se le fue largo y Varo pudo desbaratar la ocasión.

Los de Idiakez siguieron acosando la meta del portero del Nástic y crearon cinco ocasiones claras en doce minutos. Varo se erigió como el héroe de los de Tarragona con una espléndida parada de reflejos tras un remate de Hugo Rama.

Parecía que perdonar tanto acabaría pasando factura al Dépor, pero el equipo volvió a demostrar su buen hacer a balón parado. Un córner en el minuto 71 que puso Lucas Pérez acabó con el remate de Pablo Martínez a la red, que hizo estallar la alegría en el estadio.

La mala noticia de la tarde fue la lesión de Hugo Rama, que tuvo que dejar su sitio a Mella. La dureza del Nástic acabaría siendo castigada con la expulsión de David Concha, que vio dos amarillas en cinco minutos.

El equipo de Tarragona apenas inquietó la meta de Mackay en la segunda parte, pero sería el propio portero el que daría un susto a la afición, al pasar in extremis un balón que llegó a sus pies y que ocasionó la presión del punta del Nástic.

El Dépor controló los minutos finales e incluso tuvo la oportunidad de marcar el segundo por medio de Lucas Pérez, que sigue sin ver puerta, pero que cuajó un buen partido. Los tres puntos se quedaron en casa y Riazor celebró sus 79 años por todo lo alto.