El partido entre el Deportivo y el Real Unión de Irún dejó una primera celebración sobre el césped muy interesante. Sergio, speaker del club, fue presentando uno a uno a todos los integrantes del staff técnico y médico antes de recitar el nombre de todos los jugadores de la plantilla del Deportivo.

Uno de los más aclamados fue David Mella. El canterano volvió a mostrar su lado más juvenil al entrar al terreno de juego haciendo una pirueta. Riazor coreó su nombre de manera espectacular tras culminar una espectacular temporada.

El club dejó para el final el reconocimiento a los capitanes. Y aquí hubo varios nombres propios. Pablo Martínez recibió un gran cariño y la afición pidió su renovación. El central es uno de los jugadores que acaba contrato y su futuro no está del todo claro.

Con Villares y Lucas Pérez, Riazor se entregó al máximo. En el caso del delantero, la afición mostró su postura tras toda la polémica de la semana entonando un claro "Lucas se queda, Lucas no se va". El jugador agradeció esas muestras de cariño y fue ovacionado también por sus compañeros.

Esta era la primera parte de una celebración que continuará en la fuente de Cuatro Caminos. Mañana será el turno para salir al balcón del Ayuntamiento después de que tanto el club como el consistorio arreglaran sus diferencias de los últimos días.