El España-Islandia de Riazor supone el retorno de la Selección Española a A Coruña tras 13 años de ausencia, pero la ocasión está siendo histórica por otro motivo. Además de la polémica del coste del partido, superior a los 400.000 euros, algo de lo que ya informamos en el mes de enero, se están produciendo colas para acceder a Riazor: El partido lleva casi media hora en marcha y todavía hay gente esperando para entrar en el estadio.

Hay cientos de personas esperando para entrar en las gradas de Pabellón Inferior y Superior, pese a que la primera parte del partido ya está más que avanzada, lo que ha provocado furiosas críticas de los aficionados, tanto en las redes sociales como en el propio estadio.

Fuentes de la misma cola del estadio consideran que puede haber gente que se llegue a perder la primera parte al completo.

El convenio se aprobó in extremis el lunes

A la caótica organización del partido por parte de la RFEF y el ayuntamiento de A Coruña se une la polémica por los altos costes del encuentro para las arcas municipales. En el mes de enero se anunciaba el partido y poco después se conocía que los costes superarían los 400.000 euros para las arcas municipales.

La polémica por el coste del partido ha vuelto esta semana, tras conocerse que el convenio entre Concello de A Coruña y la RFEF se ha firmado a última hora, ayer lunes, y que este partido de la selección supondrá el 41% de los fondos dedicados a eventos deportivos de este 2022. El BNG ya denunció en su momento el alto coste del encuentro, críticas a las que hoy se ha sumado la Marea Atlántica, socios preferentes del gobierno local de Inés Rey.

A los 400.000 euros de coste se une un desastre organizativo que está dejando muy descontentos a miles de aficionados, entre ellos muchos niños, y perjudicando la imagen de la ciudad.