Praga acoge este viernes 18 de noviembre el Campeonato del mundo de culturismo natural. Una cita en la que no faltará representación gallega gracias a Alexandra Gómez, nacida en Francia pero de padres vigueses y asentada en Galicia desde 2019.

Gómez se acercó a esta disciplina por casualidad. "Acabábamos de llegar a A Coruña y no conocía a nadie, necesitaba una motivación, un reto", explica la gallega, que llevaba tiempo practicando deporte en casa. Fue así, por azar, como apareció el culturismo en su vida, pasando a formar parte de ella y de su día a día.

No solo importa el físico

Gómez explica que los atletas que practican culturismo natural no usan ningún tipo de ayuda química para crecer muscularmente ni como diuréticos. "Podemos usar proteínas o aminoácidos, pero no fármacos que hagan que se te desarrolle más musculatura", concreta la deportista.

"Es una disciplina en la que no solo cuenta el físico, sino que engloba un poco todo: también el bikini, la puesta en escena, busca que seas femenina pero natural…", explica Gómez. Y es que dentro del culturismo femenino hay diferentes categorías como bikini fitness, wellness, sport model… escalando desde menos desarrollo muscular a más.

Alexandra Gómez con uno de sus trofeos (Cedida).

La joven se presentó por primera vez a un campeonato hace un año. La atleta compitió en el nacional de culturismo natural con gran éxito, venciendo en las dos categorías en las que se presentó, y el pasado mes de octubre culminó su gran año clasificándose para la competición internacional. Córdoba fue testigo de su victoria y de como pasó de sport model amateur a pro, consiguiendo el pase directo a Praga, donde también debutará a nivel mundial en la categoría bikini fitness en amateur.

"No contaba con ello, fue una sorpresa. El feedback de los jueces siempre fue muy bueno y, casualidad o trabajo, tuve la suerte de poder participar en unos campeonatos medianamente grandes para ser mi primer año", explica la atleta.

Una larga preparación

La competición de Praga está muy cerca y Alexandra Gómez ultima los preparativos para este viernes siguiendo la pauta de su preparadora, una línea de trabajo basada en dos ejes: la parte física de gimnasio y la alimentación, con una dieta adaptada a lo que necesita conseguir para este 18 de noviembre. La preparación de estos atletas es constante a lo largo de todo el año, pero varía según el momento en el que se encuentre cada persona y la cercanía de las competiciones.

"Ahora hacemos una Peak week, que son unos días de descarga. Vamos quitando paulatinamente los carbohidratos y el agua. El día de la competición hacemos lo que llamamos una carga: metemos mucho carbohidrato e intentamos meter lo mínimo posible de agua para que se nos vea más definidos", explica Gómez.

Un esfuerzo muy duro a nivel físico y metal que requiere sacrificios. "Tengo dos niños pequeños. Estuve de preparación en verano y me tocó aguantar las comidas familiares, los cumpleaños, los helados, las salidas a la playa… No es fácil mentalmente. Ir al gimnasio lo puede hacer cualquiera, pero aguantar las tentaciones constantes…", indica la atleta.

Pero el sacrificio que merece la pena. "Hay días en los que se hace muy cuesta arriba, que tienes poca energía porque estás entrenando con la misma intensidad pero cada vez tienes menos comida. Pero después de subes ahí arriba y sin importar el puesto en el que quedes, el llegar allá arriba es todo un logro, porque llegamos los que más fuertes somos, los que aguantamos la preparación", explica Gómez.

Alexandra Gómez se prepara en el gimnasio para las competiciones (Cedida).

La atleta viaja a Praga con esperanza, aunque apenas conoce a las personas contra las que deberá competir y frente a las que mostrará el trabajo que ha realizado para poder subirse al escenario. "A mí no me echa para atrás nadie. Voy muerta de miedo, porque es la primera vez que voy a un mundial y hay nervios. Pero ganas, más aún", asegura con rotundidad la culturista.

Gómez, además, compite contra mujeres más jóvenes que ella. "Debuté el año pasado con 38 años, con dos niños, con el trabajo, entrenando en casa… Haber llegado ahora mismo a este nivel, a formar parte de la Selección Española, es algo que no me creo ni yo", comenta la atleta, que reconoce que será "la mujer más feliz del mundo" tanto si gana como si no.

Visibilizar el culturismo natural

Alexandra Gómez reinvindica, además, más visibilidad y espacio para el culturismo natural. "Somos un equipos de unas 60 personas que nos vamos al mundial y queremos que se nos conozca, que se vea que hay otros deportes que también son importantes", reivindica la atleta.

Y es que los culturistas que compiten en Praga en este mundial lo hacen pagando "todo" de su bolsillo, desde la inscripción hasta el viaje. "No tenemos ninguna ayuda ni patrocinadores… Nos gastamos un dineral para tres días en Praga, muchos estamos ahorrando todo el año para poder ir. Y la preparación es cara al pagar a un preparador, el gimnasio, los suplementos, el bikini…", enumera Gómez.

Un esfuerzo mental, físico y económico que ha llevado a Alexandra Gómez a Praga para enfrentarse a las mejores en una disciplina que lleva poco tiempo trabajando pero en la que ya ha logrado grandes logros. El de mañana es solo un paso más para esta hija de emigrantes gallegos en Francia que no se detiene ante nada.