Una pareja de gallegos busca la victoria en el mundial de Hyrox, una nueva modalidad de fitness

Las carreras de obstáculos, conocidas en el mundo del deporte como OCR, les unieron y tras varias competiciones y duros entrenamientos enfrentarán mano a mano un ambicioso reto en unas semanas: el Mundial de Hyrox en Niza (Francia) el 8 y 9 de junio.

Esta es la historia de Sergio Monteagudo y Manuel Romero, de 43 años, deportistas de alto nivel que desde hace años practican y compiten en esta modalidad que está en auge actualmente en Galicia y que consiste en 8 kilómetros de carrera intercalados con diferentes ejercicios de fuerza, agilidad y resistencia.

Foto: CEDIDA

Ambos son gallegos, Sergio de A Coruña y Manuel de Boiro, y tras comprobar en alguna competición en la que fueron rivales que juntos podrían hacer grandes cosas, ayudados por tener la misma edad e ir en la misma categoría, los logros han llegado y esperan seguir aumentando su palmarés. En 2022 consiguieron un tercer puesto en un campeonato nacional de Hyrox y se clasificaron en 2023 para el Mundial de Manchester (Inglaterra), donde consiguieron una excelente sexta posición.

El año pasado participaron en el Europeo y quedaron cuartos, un buen puesto que mejoraron en la categoría de relevos donde resultaron campeones junto con otros dos compañeros. Romero es entrenador de crossfit y de zumba y da clases en un gimnasio de Vilagarcía (Pontevedra), donde pronto implantará el Hyrox, y Monteagudo trabaja en suministros de un hospital por la mañana y dedica sus tardes a entrenar.

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Cuentan que a la hora de enfrentarse a un Hyrox se debe tener una estrategia para cada prueba o workout, como por ejemplo que uno de los deportistas haga más distancia en la máquina de esquí de fondo u otro más zancadas con un saco a la espalda.

Eventos multitudinarios

Precisamente estos ejercicios se unen a otros que componen esta modalidad cada vez más común en gimnasios de Galicia, España y toda Europa como empuje de trineo, burpees con salto durante 80 metros, 1.000 metros de remo, 200 metros caminando sujetando una pesa en cada mano o wallballs (lanzar un balón grande de determinado peso contra una pared a una altura concreta).

Las competiciones de Hyrox, según cuentan los gallegos, comenzaron a popularizarse en 2021, cuando acudían unas 1.500 personas. A ello le siguió que en 2023 subiese la afluencia hasta las 5.000, de manera que ahora muchos aficionados al deporte lo practican. En A Coruña hay dos gimnasios que disponen de este tipo de entrenamiento, en Santiago otro y en Vigo hasta cinco. Las modalidades de competición se dividen en dobles, individual o relevos.

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Monteagudo y Romero reconocen que suelen sufrir más en las dos últimas pruebas del Hyrox y hacen hincapié en detalles importantes como que en cada kilómetro de carrera (lo que supone tres vueltas alrededor de un pabellón) no se pueden distanciar en más de 20 segundos desde que el primer deportista pasa por el chip que marca la distancia recorrida.

"Hay mucha competencia, entrenamos los 7 días de la semana"

De cara al Campeonato del Mundo de Niza en el que participarán en menos de dos meses, apuntan que "hay mucha competencia", pero centran su meta en igualar o mejorar su tiempo de 2023 y quedar entre los cinco primeros. Para ello, entrenan los siete días de la semana, aunque no todos para esta modalidad. Monteagudo también compite en trails y carreras de obstáculos y realiza para ello entrenamientos específicos.

Alemanes, americanos, franceses o ingleses han ganado en ediciones anteriores y son los rivales a batir, un nivel al que se une la dificultad añadida del peso pro, es decir, más peso en esta competición que con el que los gallegos entrenan normalmente.

Sobre este deporte, hacen un llamamiento a todo el mundo a probar, resaltando que "puede practicarlo cualquiera con un mínimo de forma", además de que no hay límite de tiempo para terminar las ocho carreras y los correspondientes ejercicios que implica. "Si quieres competir a cierto nivel tienes que ser bueno en resistencia y en velocidad y estar fuerte, hacer entrenamientos específicos", detallan, sobre lo que matizan que "estos entrenamientos no requieren tanta técnica como en crossfit".

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De cara al futuro, les gustaría conseguir un podio internacional juntos, una incógnita que se resolverá en unas semanas y para la que están echando el resto, de manera que Galicia puede llegar a lo más alto del Hyrox internacional.