El buceo es uno de los deportes de moda en A Coruña desde hace un tiempo y su auge lo demuestran los centenares de personas de la ciudad que se animan cada año a asomarse a descubrir todas las maravillas que esconde el fondo marino. Dos escuelas de referencia del área coruñesa, Nauga y Buceo Galicia, han notado un aumento del alumnado tras la pandemia, algo que señalan que está motivado porque la crisis sanitaria obligó a limitar los planes a la zona donde se reside y esta tendencia ha permanecido.

Monitores de ambas escuelas coinciden en que antes la gente buceaba para viajar y que ahora lo hacen por hobby regularmente. Uno de los cursos más demandados es el Open Water Diver, en el que se inician los que quieren probar este deporte, que en A Coruña ofrece poder explorar tesoros como barcos hundidos en aguas coruñesas como el chino ‘Rytterholm’, el Pilar Blanco, el Mar Egeo o el Peter Robinson, además de grandes acantilados subacuáticos con un paisaje y vida marina excepcionales.

Nauga: "Tenemos entre 50 y 60 buceadores cada fin de semana en temporada alta"

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Al frente de Nauga están la encargada de tienda y RRHH, María González; Brian Álvarez; el director de formación y del centro de buceo y Diego López, instructor de buceo y patrón. Actualmente tienen un total de 70 buceadores en formación realizando cursos de distintos niveles: desde el curso básico conocido como el Open Water Diver hasta futuros instructores.

Sobre el auge del buceo en la ciudad, reconocen que cuando se dio por terminada la pandemia la gente se animó a salir y a retomar o empezar aficiones, de ahí que muchos contactaran con Nauga. Exponen que en A Coruña forman parte de los dos centros de buceo fuertes (el otro es Buceo Galicia) y aseguran que ambos "tienen mucho trabajo". "Parece difícil de creer, pero en A Coruña tenemos unos puntos de buceo increíbles y paisajes subacuáticos impresionantes, los que los conocen quedan enganchados a su encanto", cuentan.

Corroboran que la formación más demanda es el Open Water Diver, pero apuntan que Nauga es un centro de buceo local, en el que se busca crecer como buceador y formarse poco a poco hasta alcanzar los objetivos. "La formación del buceador avanzado está casi a la par con la iniciación en el buceo", explican. Sobre el buceo, concretan que "es un deporte que se práctica para desconectar y relajarse y de los pocos en los que te sumerges por completo con la naturaleza".

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"Estamos acostumbrados a viajar y ver solo la superficie, pero en todo el mundo tenemos puntos de buceo con autenticas maravillas debajo del agua", afirman, mientras ponen ejemplos como los de barcos hundidos en aguas coruñesas. El perfil de la gente que acude a su escuela para bucear no está definido, ya que cuentan con niños desde 15 años hasta personas de 60 "que descubren una actividad nueva con la que superarse y exigirse".

En este contexto, alegan que con el auge del buceo no comprenden que "no se le de la visibilidad que merece a nivel turismo". En Nauga, solo los fines de semana mueven de media entre 50 y 60 buceadores cada fin de semana en temporada alta, junto a los que bucean por la semana. "Los meses de invierno cuando el mar lo permite, los barcos se llenan de gente", apuntan.

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Asimismo, admiten que no es un deporte económico, porque supone un desembolso de entre 350 y 400 euros, pero concluyen que "una vez tienes la titulación es asequible para todo el mundo". La titulación está reconocida a nivel mundial hasta una determinada profundidad y se puede bucear desde 35 euros.

Buceo Galicia: "Tenemos un volumen de 2.500 buceadores anuales"

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El equipo de Buceo Galicia está integrado por dos propietarios que son a la vez instructores y patrones portuarios, un formador de instructores, cuatro instructores de buceo, tres Divemaster o monitores y cuatro alumnos Divemaster o instructores. Desde la empresa, calculan que forman a entre 300 y 400 alumnos anuales de todos los niveles y que el volumen total aproximado es de 2.500 buceadores en 12 meses.

Los cursos que ofrecen son a todos los niveles, desde el que quiere iniciarse o descubrir el buceo por primera vez hasta el que se quiere convertir en instructor y dedicarse profesionalmente a ello. Además, son el único centro Instructor Training de SSI (Scuba Schools International) en Galicia.

Sobre el auge del buceo en la ciudad, rememoran que "la pandemia hizo que mucha gente empezara a hacer actividades en su ciudad" porque en 2020 la movilidad entre zonas era reducida. "Sí es cierto que el buceo ya hace unos cuantos años que aumentó el número de gente que lo practica. La gente buceaba para poder viajar y ahora lo hacen como un hobby todo el año y gracias a eso tenemos un volumen de gente continuo y trabajamos al mismo nivel durante todo el año", explican.

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"La demanda del buceo es muy cíclica, hay años en los que tenemos mayor número de alumnos que se inician en este mundo", dicen, sobre lo que aclaran que primero se realiza el primer nivel de Open Water Diver y al siguiente año esos buceadores se quieren especializar para poder seguir avanzando y hacer otras especialidades. "Estos han sido dos años en los que hemos dado importancia a la formación profesional y estamos realizando una gran cantera, incluso guías e instructores de buceo, un curso al año de instructor y unos dos cursos de monitores anuales", detallan.

Los cursos de buceo que imparten constan de la seguridad en el buceo, en procurar que los alumnos conozcan el equipo, experimentar las primeras sensaciones debajo del agua y aprender a realizar un tipo de buceo totalmente autónomo, sin depender de un instructor. Una vez cumplidos los objetivos y de haber realizado distintos ejercicios para ponerse a prueba, se consigue la tituación de Open Water.

Cuentan los instructores que existen otras especialidades para bucear a mayor profundidad con mayor seguridad, con nociones para aprender a orientarte bajo el agua y las peculiaridades del buceo nocturno, del estrés, del rescate… todo ello hasta llegar al punto de convertirse en profesional.

Los niveles tienen la siguiente sucesión: primero el curso de guía de buceo para llevar grupos e inmersiones con buceadores titulados, el siguiente nivel es Dive Master, la formación en la que el guía forma parte de un equipo docente asistiendo a instructores; y posteriormente el curso de asistente de instructor, en el que los alumnos imparten clases teóricas de manera autónoma.

Uno de los más complicados de obtener es el de máximo responsable de cualquiera de estas formaciones, para lo cual los aspirantes son valorados por examinadores externos de la organización internacional de buceo y una vez superado el examen podrán desarrollar sus funciones en cualquier parte del mundo. "El buceo es una de las actividades en las que eres capaz de inhibirte totalmente de tu vida fuera del agua, de los problemas, es ser capaces de olvidarnos de todo. Sumergirnos, meternos en el mundo subacuático en el que somos privilegiados de compartir momentos con la fauna marina en su hábitat natural", aseguran con pasión los profesionales de Buceo Galicia.

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"Es un momento de relajación, de ingravidez, sensaciones que todo el mundo debería probar al menos una vez en la vida", añaden, sobre lo que matizan que "el buceo ya no es para gente mayor con gran poder adquisitivo, sino que hay muchas facilidades para tenerlo como un hobby". En este contexto, subrayan que a día de hoy su mayor perfil de gente es joven.

"Tenemos buceadores de toda la vida, gente mayor que a una edad avanzada empieza aventura en el buceo, gente deportista, otra no tan deportista…", enumeran. Lo único imprescindible que destacan como denominador común para todos los alumnos es saber nadar y tener un estado de salud óptimo. "Actualmente el buceo es para todos: niños, jóvenes y los que no son tan jóvenes", aseguran, mientras hacen un llamamiento a todos aquellos que lo quieran probar "porque no se arrepentirán".