¿Es Arteixo un modelo en la gestión de basuras? El reciclaje pasa del 12 al 80%
Hace dos años el Concello de Arteixo tomó una decisión: salir del Consorcio de gestión de residuos de As Mariñas e iniciar un nuevo modelo de recogida de los residuos urbanos. ¿Funciona?
9 junio, 2019 06:01Desde el 1 de agosto de 2018, Arteixo gestiona su propio sistema de recogida de basuras. La idea de municipalizar este servicio tuvo que recorrer un camino que no estuvo exento de dificultades. Desde que se tomó la decisión en el Pleno, hasta que finalmente se puso en marcha, fueron necesarias varias prórrogas al Consorcio hasta que todo el sistema estuvo articulado.
El objetivo que movilizó al cambio de sistema fue la búsqueda de un sistema de valorización de residuos, que incentivase el reciclaje.
"Queríamos implementar un sistema más eficiente y conforme a la legislación que se prevé hacer obligatoria a partir de 2020", argumenta Óscar Miranda desde la concellería de Medio Ambiente de Arteixo. Con ello, se ha conseguido abaratar costes de gestión ya que "cuanto más y mejor se recicle, más se reduce el número de toneladas de residuos que es necesario trasladar al vertedero".
5 contenedores
Desde la concellería de Medio Ambiente, Óscar Miranda explica que después de visitar varios municipios buscando inspiración para diseñar el nuevo modelo de gestión de basuras, idearon un sistema pionero en Galicia, que consta de islas con cinco contenedores: vidrio, papel y cartón, envases ligeros, materia orgánica y la denominada "fracción resto", destinado a todos los residuos que no encajan en los otros cuatro.
"La separación en origen es todavía baja, por eso diseñamos una fracción resto, para que sirviese también para que las personas que aún no están concienciadas respecto a la separación de residuos pudieran utilizarlo, evitando la contaminación de los contenedores monomateriales", explica Miranda.
Implantación gradual
"Todo cambio y toda implantación suele ser traumática, cambiar la forma de hacer las cosas lleva tiempo. Lo primero es que la gente se conciencie, y por otro lado, somos conscientes también de que se lo tenemos que poner fácil a los ciudadanos" explican. El proceso es gradual y está en constante evaluación para obtener datos que sobre la efectividad de las medidas.
En este sentido, desde la Concellería de Medio Ambiente continúan implementando mejoras en el proceso de recogida de basuras. "En estos momentos estamos en una fase piloto recogida puerta a puerta de papel y cartón en tiendas, empresas, colegios… con ello conseguimos mayor pureza". Señala que falta también desarrollar un pilar fundamental que es el compostaje, "utilizando correctamente compostadores conseguiremos un doble beneficio, fertilizar huertas y ahorrar porque será materia orgánica que ya no haya que trasladar a la planta de tratamiento".
Por último, desde la concellería apuntan a la ampliación de los servicios del punto limpio, para los residuos de gran volumen o especialmente tóxicos. Hacen hincapié en la dispersión de la población del concello y pensando en facilitar el procedimiento establecerán puntos limpios móviles, que irán por las parroquias en itinerarios de recogida de este tipo de basuras.
Ahorro de más de 25 euros en tasas
El nuevo sistema supone un abaratamiento en la prestación de servicios: los ciudadanos de Arteixo se ahorran ahora más de 25 euros en el pago de las tasas de recogida de basuras. Con el servicio del Consorcio, la tasa para viviendas ascendía a 125,84 euros mientras que actualmente la tasa es de 98 euros, una cifra que es el "resultado de dividir el gasto total de implantación y operatividad del servicio, pero es una cifra que se volverá a estudiar, y se podrá ajustar a la alza o la baja", sostiene Miranda.
Algo que dependerá del éxito de la implantación del modelo: "Cuanto mejor se comporte la población, la tasa bajará más, ya que si los residuos están bien separados, el concello percibe un mayor retorno por el reciclaje y esto puede repercutir en un abaratamiento de las tasas por la recogida de basura", aseguran desde la concellería de Medio Ambiente de Arteixo.
"Policía do lixo": unas brigadas recogen datos cada noche
Todo el proceso de implementación del nuevo modelo está siendo acompañado y supervisado por personal del concello de Arteixo, que recaba datos acerca de la efectividad de las medidas. "Recogemos las cifras de kilos reciclados, eso sirve para hacer un seguimiento. Cada noche una brigada sale a revisar el estado de las islas de contenedores, si se ha separado correctamente. En caso de que no sea así, la brigada procede a reordenar los residuos en la medida de los posible".
Algunos vecinos han bautizado a estas brigadas como "polixo", o policías de la basura, aunque Miranda insiste en que no se trata de una policía como tal, sino un equipo de personas que apoya el proceso de implantación del nuevo sistema. En total, hay unas 20 personas trabajando a pie de calle con este objetivo.
Presupuesto para concienciación
Aunque están previstas, por ahora el concello no prevé que se impongan sanciones por malas prácticas en el reciclado hasta que culmine esta fase de adaptación al nuevo modelo. Precisamente por eso, una parte significativa del presupuesto aprobado para la gestión de basuras se dedica a actividades de concienciación. Unos 3 euros al año por vecino se dedican a este fin. Casi 100.000 euros al año invertidos con esta finalidad, que suman un total de 800.000 euros dentro del presupuesto de 8 anos de 10.150.000 euros que el concello arteixán aprobó hace dos años.
¿Ha incrementado esto el reciclaje entre los vecinos? Apenas han transcurrido 10 meses desde que se produjese el despliegue del nuevo plan municipal, pero el balance hasta el momento indica que se ha pasado de reciclar un 12% a un 80% en envases, vidrio y cartón. "Muchas de las quejas las recibimos por el hecho de que las bocas de los contenedores sean pequeñas, pero la verdad es que el hecho de que haya que introducir los envases uno a uno ayuda a que no se depositen restos mezclados". El gesto cotidiano de tirar la basura a última hora del día, se ha convertido en una acción mucho más consciente en Arteixo.