Un estudio ha logrado identificar 20 variedades autóctonas de olivo de Galicia, lo que abre la puertas a una producción de aceite 100% gallego. Este descubrimiento ha sido fruto de las investigaciones realizadas hasta el momento por el grupo VIOR (Viticultura, Olivo y Rosa) de la Misión Biológica de Galicia (MBG), perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) con la financiación de la Fundación Juana de Vega (FJDV) y la colaboración de la Asociación de Productores de Aceite y

Aceituna de Galicia (APAG) y la Asociación de Viveristas del Noroeste

(ASVINOR).

El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Fundación Juana de Vega (FJDV), que ha financiado el trabajo durante los últimos cinco años por un importe superior a los 300.000 euros, dan por finalizada la primera fase de recuperación, descripción y reconocimiento de las antiguas variedades autóctonas de olivo de Galicia.

Durante estos años, se han marcado y estudiado 167 olivos en distintos puntos de las cuatro provincias gallegas, diferenciando 20 variedades distintas. El CSIC ha iniciado el proceso de registro en la lista española de variedades de interés comercial de 11 de ellas, para que sean reconocidas oficialmente a nivel internacional como únicas y diferentes a todas las existentes. A continuación, y en colaboración con la Xunta de Galicia, se completará también el proceso de certificación de varios clones de cada una de estas variedades.

Los detalles del trabajo se han dado a conocer hoy en una rueda de prensa en la Delegación Institucional del CSIC en Galicia y se mostrarán más ampliamente en la jornada técnica que se celebrará el próximo día 24 de marzo por la mañana en las instalaciones de la Misión Biológica de Galicia (CSIC) (Pontevedra), pudiéndose inscribir los interesados en la página web de la Fundación Juana de Vega (FJDV) www.juanadevega.org.

Variedades desconocidas hasta el momento

Los resultados obtenidos en el proyecto de ‘Apoyo a la consolidación en el mercado de aceites gallegos de calidad, mediante el uso de variedades de olivo autóctonas’ tienen un gran valor tanto científico como práctico. En el primer caso, se trata de variedades desconocidas hasta el momento, que contribuyen a ampliar la diversidad del patrimonio agrario común existente hasta ahora.

También en el ámbito de la investigación en temas relacionados con las humanidades (historia agraria, arqueología, paisaje agrarios…), el descubrimiento de estas variedades asociadas a distintas zonas de Galicia, abre diferentes líneas de estudio que deberán ser abordadas con el máximo rigor y profundización.

En la presentación, Enrique Sáez, presidente de la Fundación Juana de Vega ha asegurado que Hoxe Galicia celebra a recuperación das súas oliveiras, abrindo a porta para iniciar a produción de aceite cen por cen galego”.

Por su parte, María del Carmen Martínez, jefa del Grupo de Viticultura, Olivo y Rosa de la Misión Biológica de Galicia, ha indicado que “Estamos ante una línea de investigación con un recorrido enorme y un gran futuro como recurso agrario para Galicia, que incluso puede llegar a ser tan importante como el del vino”.

“Estoy convenido de que los aceites gallegos tienen un futuro inmejorable y que, además de promover el consumo de kilometro cero, serán de una altísima calidad”, afirma Javier Rey, delegado del CSIC en Galicia.