Tres proyectos beneficiados por el PEL de la Diputación

Tres proyectos beneficiados por el PEL de la Diputación

Economía

Arquitectura, turismo y tecnología: Tres casos de emprendimiento con éxito nacidos en A Coruña

El programa PEL Emprende de la Diputación de A Coruña ha supuesto un impulso para proyectos como Albarari, Bionix y Marta Trigas. Hablamos con los creadores de estas iniciativas empresariales

5 julio, 2022 06:00

Emprender no es un camino fácil. Iniciar un proyecto desde cero es como escalar una montaña. Alcanzar la cima conlleva tener que recorrer una larga subida para la que no siempre uno dispone de todos los materiales necesarios que le ayuden a hacer más llevadero ese camino.

En el caso de los emprendedores de la provincia de A Coruña, cuenta con un ayudante para afrontar esta dura subida: la Diputación de A Coruña. El organismo provincial, a través de su Plan de Empleo Local (PEL), apoya la creación y el reconocimiento de empresas del ámbito local, además del fomento del emprendimiento y la gestión y coordinación de los espacios de trabajo colaborativo.

Con estas ayudas, la Diputación busca contribuir a la consolidación y al fortalecimiento del tejido empresarial en los ayuntamientos de la provincia de A Coruña a través del apoyo a la inversión de pequeñas, medianas empresas, microempresas y personas autónomas.

Son muchas las pymes y emprendedores que se han visto beneficiados de las ayudas de este programa de la Diputación. Hemos elegido tres proyectos respaldados por el PEL para conocer en profundidad las mejores prácticas en emprendimiento.

Turismo, tecnología y arquitectura. Tres sectores muy diferentes con un factor común, el PEL de la Diputación. Conocemos más de cerca estos tres proyectos exitosos nacidos en A Coruña. Y lo hacemos de la mano de quienes mejor los conocen, sus creadores.

Albarari

Empresa ganadora de los premios PEL en la categoría de mejor iniciativa empresarial nueva en la edición del año 2020

Una de las burbujas de Albarari

Una de las burbujas de Albarari

Esta empresa del sector turístico astronómico nació en el año 2018 de la mano de un matrimonio gallego, Eduardo y Paula, a quienes les surge la idea de crear este alojamiento astronómico después de pasar una noche en una jaima en el desierto de Dubai. Esta experiencia, sumada a su pasión por la astronomía, sentaron las bases de su proyecto Albarari.

El innovador modelo de negocio de Albarari combina la actividad educativa y divulgativa en materia de Astronomía con la posibilidad de vivir una experiencia inmersiva en plena naturaleza.

La experiencia que ofrece esta empresa nacida en A Coruña consiste en dormir en una burbuja panorámica que facilita la observación del firmamento. Las burbujas fueron diseñadas y patentadas por Albarari y ofrecen una visión de 360 grados.

"Empezamos con una burbuja en A Coruña", comenta Paula, pero poco a poco fueron creciendo ante la gran demanda. Ahora, ya disponen de 7 burbujas en A Coruña y cinco en Sanxenxo. Ambos establecimientos están situados en emplazamientos magníficos para la observación del firmamento. Alabari se encuentra en proceso de exportar su proyecto en forma de franquicias a otros puntos, pero siempre cuidando la ubicación y sin abandonar el concepto de exclusividad que les caracteriza.

No hay que ser un experto en astronomía para disfrutar de la experiencia Albarari: "Está pensada para que todas las personas puedan apreciar la belleza del firmamento". Telescopios y planisferios ayudan a situar al visitante en la bóveda celeste.

Alzarse con el premio PEL supuso "un empujón" para el proyecto que en aquellos momentos -año 2020- sufría las duras consecuencias de la pandemia, que afectó especialmente a sectores como el turístico. "Fue una satisfacción enorme recibir el premio. Fue nuestro primer reconocimiento y llegó, además, en tiempos muy difíciles", afirma Paula.

Bionix

  • Empresa ganadora de los Premios PEL en la categoría de mejor iniciativa innovadora en la lucha contra el Covid 19 en la edición del año 2020
Equipo de Bionix

Equipo de Bionix

Bionix es una start-up tecnológica nacida en noviembre de 2017 con la visión de ayudar a la empresa para mejorar su cadena de suministro mediante la tecnología. Esta empresa coruñesa diseña y fabrica equipos y software combinando RFID, IOT e Inteligencia Artificial para que cualquier empresa pueda tener un control total de su flujo de inventarios.

La actividad de Bionix nada tiene que ver con el mundo de la salud, pero en marzo de 2020, en pleno confinamiento y colapso sanitario por el Covid, pusieron su granito de arena diseñando un respirador de bajo coste. Y lo hicieron en tiempo récord, en 30 días ya tenían terminado el prototipo y a los nueves meses ya contaban con su homologación para comenzar a ser utilizados.

En este proyecto participaron cerca de unas 80 personas, tal y como señala el fundador del Bionix, Jacobo Penide, quien recuerda cómo en aquellos momentos tan duros todos se volcaron, tanto trabajadores, como empresas del sector a través del Clúster TIC. "Fue todo un ejemplo de cooperación", afirma.

Al margen del impacto económico que permitió consolidar el proyecto, lo que valora Bionix es el reconocimiento a un trabajo llevado a cabo en un momento tan duro para todos "Fue un impulso para seguir trabajando en innovación y en el desarrollo de tecnología", señala Penide.

Marta Trigas

  • Coworker del Pazo de Arenaza
Marta Trigas y uno de sus proyectos arquitectónicos

Marta Trigas y uno de sus proyectos arquitectónicos

Marta Trigás (A Coruña, 1985) se ha especializado en la promoción de proyectos de arquitectura bioclimáticos, es decir, que se diseñan desde la óptica de la mayor eficiencia energética. Son capaces de lograr bajos consumos y a la vez un alto confort mediante el uso de materiales respetuosos con el medio ambiente. Además, tiene en cuenta las condiciones climáticas y culturales del lugar donde se vaya a construir la edificación. De hecho esa es la clave, para Marta Trigás. Saber dónde se va a construir y a partir de la orientación y el área geográfica en la que se va a levantar un nuevo edificio estudiar todas sus posibilidades desde
el punto de vista climático.

Según ella misma cuenta, su estancia en el coworking del Pazo de Arenaza de la Diputación supuso una importante ayuda para su proyecto. Trigas se formó en Barcelona, donde estuvo trabajando varios años."Al poco tiempo de volver a Galicia, llegó a mis oídos que se iba a montar este espacio colaborativo. Presenté mi plan de empresa, gustó, gané puntos y me concedieron una plaza por tres años", explica. Ahora, cuando ya está a punto de poner fin a su etapa en este espacio colaborativo, Trigas valora muy positivamente su paso por este lugar: "Me han facilitado muchas herramientas".