La Autoridad Portuaria de A Coruña abrirá de nuevo otra vía de diálogo con Puertos del Estado para negociar las condiciones del préstamo de 200 millones de euros que le concedió para la construcción del puerto exterior. Lo hará tras admitir, al publicar esta semana la memoria y las cuentas de 2023 (cerradas con pérdidas por valor de 3,3 millones y un resultado de explotación positivo de 2,2) que su tesorería "se ha resentido". Ante esta situación, el Puerto informó en una nota de prensa de que debe trabajar en "un nuevo acuerdo con el ente estatal" para definir las nuevas condiciones de ese crédito y "garantizar" su solvencia y poder invertir en sus instalaciones interiores y exteriores.

No será la primera vez que el Puerto negocie con el órgano del Estado por este asunto, pues para "aliviar la tensión financiera" las dos partes acordaron a mediados de 2021 un nuevo calendario para la deuda. Establecieron entonces una especie de moratoria hasta el año 2035 para "reestructurar" el endeudamiento. El presidente portuario, Martín Fernández Prado, aclaró en aquel momento que la solución pactada no consistía en ampliar el periodo para empezar a amortizar el crédito de 200 millones, que de hecho empezó en 2021 después de diez años pagando solo intereses, sino en "suavizar los pagos" durante los 14 años que deben pasar hasta 2035.

A la "reestructuración" de la deuda se refirió el pasado mes de mayo el ministro de Transportes, Óscar Puente, en una oportuna visita a A Coruña para presentar el plan director del Corredor Atlántico y avanzar que el Estado establecería con la Xunta y el Concello un convenio para reordenar la fachada marítima y trasladar la actividad de los muelles interiores al puerto exterior. Aunque se le preguntó, Puente no concretó si estaba sobre la mesa la posibilidad de condonar la deuda, a lo que se niega el Estado. La "reestructuración" a la que aludió puede tener relación con "la renegociación de las condiciones del préstamo" a la que se refieren ahora los responsables del Puerto de A Coruña para garantizar su solvencia “a medio plazo” y poder invertir en sus muelles.

La subida del tipo de interés

La Autoridad Portuaria ya reconocía en 2023 que iba a cerrar ese ejercicio con pérdidas por el "excepcional crecimiento de los tipos de interés" de las deudas a largo plazo con entidades de crédito, que causarían impacto en los costes financieros de la deuda. El Puerto atribuyó esta semana a esta "extraordinaria subida", del 0,55% al 3,90%, el principal motivo de las pérdidas registradas.

Para defenderse ante el incremento de los intereses la entidad coruñesa acordó con el Gobierno estatal adelantar en un solo pago el año pasado una amortización extraordinaria de 10 millones de euros, a cambio de que Puertos del Estado mantuviese fijo el tipo del crédito hasta 2026. Pero la medida, a tenor del llamamiento del Puerto a renegociar el préstamo, puede no ser suficiente para afrontar los compromisos inmediatos con la deuda.

La condonación de la deuda no aparece en el protocolo firmado en mayo por las administraciones estatal, autonómica y municipal para crear la comisión de trabajo conjunta que concrete la transformación de la fachada marítima de A Coruña. En ese documento sí se alude a la obtención de ingresos para asumir el endeudamiento mediante la venta de suelo en San Diego, pero eso no ocurrirá hasta que este muelle quede liberado de actividad en 2027. Con el protocolo, las administraciones renuncian a obtener fondos con la privatización de suelo en los muelles de Batería y Calvos Sotelo, como figuraba en el Plan de Empresa del Puerto de 2023.