La inserción laboral de las personas con TEA sigue siendo un reto para la sociedad gallega
Más del 70% de las personas con este trastorno está desempleada a pesar de realizar trabajos de calidad, eficientes y competitivos si tienen la oportunidad.
20 febrero, 2021 06:00Los hombres y las mujeres con Trastorno del Espectro del Autismo (TEA) son uno de los colectivos con mayores dificultades de acceso al mercado laboral. Un estudio de Autismo Europa del año 2014 señalaba que entre “el 76% y el 90% de las personas con TEA está desempleada”, lo cual nos ofrece una idea de la exclusión que sufre el colectivo. Los datos son alarmantes, y en ese sentido desde la Asociación Galega de Asperger (ASPERGA) no nos resignamos y aceptamos el reto con la esperanza de invertir la tendencia.
Las personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA) realizan trabajos de calidad, eficientes y competitivos. En algunos casos, se requieren apoyos y recursos concretos y se hace patente la necesidad de flexibilizar las opciones de acceso al empleo existentes en la actualidad. En la mayoría de los casos, esos apoyos se prestan al inicio y paulatinamente van desapareciendo hasta convertirse en apoyos puntuales. Aun así, esta población tiene dificultades para su inserción laboral en el mercado ordinario, ya que todavía, existe un gran desconocimiento sobre esta discapacidad.
El empleo como derecho fundamental
El empleo es un derecho fundamental que a lo largo del tiempo se ha consolidado como un factor esencial para la calidad de vida, así como en el desarrollo personal, lo cuál va a permitir alcanzar la plena participación de cualquier individuo en la sociedad.
A lo largo de las últimas décadas, el desarrollo de políticas de empleo ha ocupado un espacio importante en la acción de las diferentes administraciones (Autonómica, Central y Europea). A través de éstas se han puesto en marcha diversos programas para fomentar la incorporación de la sociedad al mercado laboral, y de manera específica la de algunos colectivos como es el caso de las personas con discapacidad.
Queda clara la importancia del empleo para la comunidad como un elemento más que contribuye al desarrollo de nuestra sociedad, y a nivel individual como herramienta clave para lograr la inclusión social y realización personal siendo indispensable para afrontar la etapa adulta con autonomía e independencia, algo imprescindible y que nos permitirá ejercer nuestros derechos y libertades.
La importancia de la colaboración para favorecer la inserción
Si bien es cierto que existe un marco legislativo que busca favorecer las oportunidades de empleo para las personas con discapacidad, debemos seguir apostando por la colaboración entre organismos y empresas, favoreciendo la inserción de las personas con discapacidad. De lo contrario la exclusión social de las personas con discapacidad seguirá en aumento, y específicamente en el caso concreto de las personas con TEA, es necesario hacer explícita su mayor vulnerabilidad frente a otros colectivos constituidos por personas con discapacidad, enfrentándose a mayores tasas de desempleo y siendo más vulnerables a la exclusión del mercado de trabajo.
En cualquier caso, para que el acceso al empleo de la persona con TEA sea exitoso es imprescindible que se realice una adecuada planificación y orientación previa de actuaciones, que contemple la detección de intereses y capacidades vocacionales, y a su vez genere conocimiento sobre la realidad del mercado laboral actual y sobre los sectores en los que se pueden optimizar las oportunidades de las personas con TEA, teniendo en cuenta sus necesidades y competencias.
Por otra parte, es necesario la puesta en marcha de iniciativas que fomenten la capacitación profesional de las personas para que posteriormente puedan desempeñar sus puestos de trabajo. También es fundamental detectar barreras y proveer de recursos que puedan facilitar la incorporación de las personas con TEA en las distintas empresas, tanto públicas como privadas, y por supuesto la propia apuesta de las empresas por las personas con diversidad.
Romper las barreras
En ese sentido cabe señalar, la necesidad de mantener un diálogo fluido entre las entidades del tercer sector y las organizaciones empresariales. A través del cual se puedan identificar demandas de las empresas y nosotros, como entidades, podamos dar respuesta a esas necesidades de forma eficaz.
Hoy existe un amplio desarrollo de programas laborales, aún así las entidades nos encontramos con algunas dificultades para poder alcanzar todos los objetivos que nos proponemos:
- Escasez de recursos, sobre todo humanos, que impide llevar de forma sistemática contactos empresariales, desarrollo de iniciativas sociales, y/o prestar apoyos para el empleo que en algunos casos ha de ser individualizado y permanente, o de larga duración.
- El proceso de inserción del colectivo TEA se dificulta ante la falta de conocimiento sobre cómo atender su diversidad por parte de entidades y empresas.
- Necesidades formativas: los conocimientos de los profesionales se centran en los recursos ocupacionales y prelaborales, pero existe un mayor desconocimiento en aspectos relacionados con la prospección en el mercado ordinario o las estructuras autónomas empresariales.
- Ausencia de iniciativas integradoras en el ámbito laboral hacia el colectivo TEA.
Aun así debemos aprovechar el momento en el que nos encontramos, ya que se empieza a notar que hay:
- Mayor sensibilidad y preocupación por parte de las Administraciones Públicas hacia los TEA.
- Apertura de la sociedad, valoración y reconocimiento de los trabajos realizados por las personas con TEA.
- Creciente interés por la integración laboral por parte de las entidades sociales y un aumento de la demanda de las personas con TEA y sus familias.
- Aumento de casos diagnosticados de personas con autismo. Se trata de un importante grupo que está llegando a la edad adulta, presenta muy buenas capacidades para el desarrollo de trabajos, son demandantes de empleo y precisan de programas de apoyo específicos que faciliten su inserción laboral.
ASPERGA, mejora de la calidad de vida
La Asociación Galega de Asperger nace en el 2006, año en que comienza a tejer una red de familias y personas con Síndrome de Asperger. Tiene como misión el objetivo de luchar por un futuro de inclusión para las personas con TEA / Síndrome de Asperger.
El programa formativo de Vida Adulta de ASPERGA está encaminado a facilitar el desarrollo de la autonomía personal y la integración social y comunitaria de los usuario/as, en algunos casos con un componente de orientación y formación laboral. Contemplamos esta etapa como un momento importante en la vida de los/as usuario/as, ya que pueden seguir buscando alternativas para acceder, en la medida de lo posible, a un empleo, una vivienda o vida social plena en entornos comunitarios.
Entre los objetivos, cabe destacar:
- Desarrollar conocimientos instrumentales básicos
- Mejorar la autonomía
- Fomentar la integración social y comunitaria
- Desarrollar competencias laborales
La selección de contenidos se hace atendiendo a las necesidades de cada uno/a, teniendo en cuenta las capacidades que pretendemos desarrollar, así como el tipo de aprendizaje y teniendo muy en cuenta los intereses de los/as usuario/as. El programa se articula en torno a cuatro módulos: Autonomía, Intervención Comunitaria, Gestión de ocio y Orientación y Formación Laboral.
Además, y para complementar el desarrollo de este programa, contamos con un Servicio de Orientación Laboral, como centro colaborador especial de la Xunta de Galicia, a través del cual los usuario/as pueden adquirir las competencias transversales necesarias para mejorar su empleabilidad y alcanzar la inserción laboral.
Marta Ibáñez Pascual, Orientadora Laboral en ASPERGA / Yago Lage Caramelo, trabajador social en ASPERGA