Lara, Conchi y Andrea están detras de ‘Áncola‘, un nuevo proyecto surgido en la comarca de Ferrolterra que aúna a la perfección talento, emprendimiento y realismo. Tres mujeres con tres personalidades muy diferentes que han dado forma a una marca que busca llegar a diferentes perfiles y generaciones.

Todo empezó casi por casualidad, cuando estas tres amigas hicieron unas camisetas para celebrar un cumpleaños y, a partir de ahí, empezaron a barruntar la posibilidad de dar lugar a un proyecto común.

A principios del mes de julio presentaban ‘Áncola’, a través de las redes sociales, con dos diseños, realizados por Conchi, con los que estas tres emprendedoras buscaban tantear las posibilidades del mercado. Así, con dos propuestas muy gallegas, "Bravamente" y "Carallo 29" daban el salto definitivo para poner en marcha un proyecto basado en la "produción ecolóxica e no comercio xusto".

En poco más de un mes de vida, en ‘Áncola’ han podido sentir el apoyo de importantes firmas gallegas como ‘Eferro’ y también, explican, el de "atender pedidos de fóra da comarca, chegando a Compostela ou Ames".

Productos de mucha calidad

Andrea, Lara y Conchi se definen como "tres mulleres galegas con ganas de crear" y con intención de tejer una red de trabajo en la que la comarca de Ferrolterra tiene mucho que decir. Buscando implicar a empresas locales en la materialización de sus diseños, confiaron la producción de ‘Áncola’ a la empresa, ubicada en Neda, ‘Marca Negra Serigrafía’.

Buena materia prima y un abanico de tallas importante, son algunas de las claves de un proyecto para el que sus creadoras han tenido que estudiar mucho y repartir roles.

La creatividad de Conchi, el manejo de las redes de Lara y el desparpajo de Andrea hacen que, tal y como expresan en su logotipo, las piezas del puzle encajen a la perfección, dando lugar a un producto de calidad en el que "buscamos ser nós mesmas".

Emprender con responsabilidad

Después de mucho pensar en el cómo orientar su negocio, en ‘Áncola’ se decidieron por fabricar bajo demanda. Lara explica, en este sentido, que son "unhas currelas cós pés na terra" que, añade, sacaron esta línea de productos de forma "meditada e con moita seriedade".

"Somos moi conscientes do que implica o pequeno comercio" y "pasiño a pasiño" buscan, en ‘Áncola’, ofrecer un producto de calidad a un precio asequible para todos los bolsillos.

Cuentan cómo compaginan ‘Áncola’ con sus actividades profesionales y organizan reuniones de trabajo periódicas que pueden prolongarse horas y en las que reina "unha confianza absoluta" y les aporta una sensación de "traballar en familia".

Si Amancio empezó vendiendo batas…

Sesiones fotográficas en las que familia y amigos se convirtieron en modelos, trasladando esa energía y ambiente de buen rollo al timeline de ‘Áncola’ y una gran ilusión que encabeza Andrea, que como buena relaciones públicas, explica que "ahora ya solo me visto de ‘Áncola'".

A pesar de que fueron muy selectivas y se quedaron con aquellos elementos que creían que iban a funcionar mejor, saben que están ofreciendo un producto de gran calidad que hace que los clientes aprecien lo que hacen y, sueña Andrea en voz alta, "si Amancio Ortega empezó vendiendo batas…¿por qué no?".

Imágenes de Andrea con su padre, para vender un producto que resume perfectamente la esencia de frescura y naturalidad de ‘Áncola’ con la que esperan, cuando la situación mejore, puedan llegar a eventos y festivales porque el "boca a boca funciona muy bien" y estas tres emprendedoras saben que ver algo que gusta y llama la atención genera ese runrun que hace que la gente se interese por una marca.

De momento, están a punto de entregar la primera tirada de sus camisetas y tote bags y, hasta llegar aquí, "coidamos até o máis mínimo detalle" porque hasta el envoltorio y la manera en que sus clientes recibirán su pedido transmitirá todo el cariño y empeño que le han puesto a esta empresa.

No quieren desvelar lo que pasará de aquí en adelante, pero avanzan que "habrá sorpresas", muy pronto, en las que estas tres mujeres bravas seguirán apostando por la tierra y la comarca, poniendo toda su retranca e ilusión a disposición de unos clientes que seguro sabrán apreciar esta marca que, con los pies en la tierra, nos hace partícipes de una ilusión que ya forma parte del ADN de Ferrolterra.