Atalaya Mining, una de las empresas promotoras del proyecto Cobre San Rafael para la reapertura del yacimiento de cobre en Touro (A Coruña), ha presentado su Informe de Sostenibilidad 2023, divulgando los resultados de la compañía según el estándar internacional Global Reporting Initiative (GRI) en los seis pilares de su estrategia de sostenibilidad: buen gobierno, personas, operación segura, medio ambiente y cambio climático, sociedad, y tecnología e innovación.
La productora de cobre tiene entre sus objetivos el de proporcionar materias primas necesarias para el crecimiento económico y la transición energética, contribuyendo a paliar los efectos del cambio climático; así como el de llevar a cabo una minería responsable, que impacte positivamente en el entorno.
"Hemos trasladado al proyecto de Cobre San Rafael nuestra visión de poner la sostenibilidad en el eje de la operación propuesta para la reapertura del yacimiento de cobre de Touro-O Pino", ha explicado el CEO de Atalaya, Alberto Lavandeira, quien ha destacado que ese es su "valor como compañía y lo que nos otorga confianza a la hora de acometer inversiones en nuevos proyectos".
Proyecto de Cobre San Rafael en Touro
Según se recoge en el comunicado, el objetivo principal de Cobre San Rafael es evitar cualquier impacto adverso en el entorno – tanto medioambiental, social y cultural -, y pretende realizar una recuperación de las aguas, además de una exploración, investigación y desarrollo de proyectos mineros de manera sostenible.
En el caso del yacimiento de Touro-O Pino, señalan que el proyecto cuenta con una política de gestión minera sostenible, que en 2022 recibió la certificación UNE 22480:2019 – norma española para un sistema de gestión minero-metalúrgica sostenible -.
La mina de Touro cerró en 1987 después de que se explotara para la extracción de cobre en las décadas de los 70 y 80, lo que provocó alteraciones en las condiciones ambientales de la zona como la acidificación de las aguas próximas.
Con el objetivo de lograr una regeneración medioambiental, en 2022 se invirtieron 3,5 millones de euros en la construcción de obras de canalizaciones, bombeos y una planta de tratamiento de aguas. Esto ya ha permitido tratar 2,5 millones de metros cúbicos de aguas ácidas, evitando así el vertido directo a los cauces naturales de la comarca – los arroyos Portapego, Felisa y Barral-Angumil -.
Desde Atalaya Mining explican que "ya se han cumplido con éxito todos los parámetros exigidos por Aguas de Galicia". Tras presentar el proyecto definitivo para tramitar la solicitud de devolución al dominio público hidráulico (DPH) del agua tratada, actualmente la solicitud se encuentra en fase final de tramitación.
En el plano del compromiso social, Cobre San Rafael han mantenido un diálogo constante con los grupos de interés del proyecto para seguir impulsando su programa TERRAS – Transparencia, Ética y Auténtica Responsabilidad Ambiental y Social -, en tres ámbitos principales: medio ambiente, sociedad y progreso.