Con el fin de las vacaciones, la llegada de los estudiantes a la ciudad vuelve a disparar, como cada año, la demanda de pisos en la capital. Este año, además de la escasez de pisos disponibles para el alquiler, preocupa el incremento de su precio. Si a finales de junio ya se empezaban a ver las primeras colas en inmobiliarias desde primera hora del día, la llegada de septiembre ha duplicado la demanda.

Inmuebles sin renovar, malas condiciones contractuales o preferencia de alquiler a turistas son algunos de los factores que dificultan el mudarse a Santiago. Por ello, cada vez son más las y los que buscan alojamiento en urbes cercanas como O Milladoiro o Bertamiráns, seducidos por unos precios más asequibles, edificios más modernos y la comodidad de poder acercarse hasta la capital en coche o transporte urbano.

La Rúa das Hedras, en Milladoiro.

Según los datos del portal inmobiliario Idealista, el precio del metro cuadrado volvió a tocar altos históricos durante el mes de septiembre al aumentar de media un 8,3% con respecto a este mismo mes del año pasado en Santiago. Llama la atención la subida de casi el 20% del barrio de Conxo, seguido de Concheiros – Fontiñas.

Centrándonos en el precio por metro cuadrado de alquileres mensuales, los barrios de Santiago más asequibles continúan siendo Concheiros – Fontiñas y Campus norte – San Caetano, ambos con un precio de 7,1 €/m2. En el lado opuesto, el Casco Histórico eleva su precio a 9,1 €/m2 y Ensanche – Sar a 8,2 €/m2, siendo las zonas más caras de la ciudad. Cabe destacar que la media se sitúa en 7,9 €/m2.

Casco histórico de Santiago de Compostela.

Si hace poco conocíamos que, según la encuesta realizada por Europa Press, la mayor preocupación de los ciudadanos es la crisis económica, los datos del euribor de septiembre caen como un jarro de agua fría para los poseedores de una hipoteca a tipo variable, los cuales verán como este mes vuelve a subir el precio de la letra. Este valor crece un 1% más que, junto a la subida de agosto, se sitúa ya en 2,233%.  A estos datos hay que sumarles las subidas de tipos del Banco Central Europeo, con préstamos más caros para adquirir una vivienda.

De este modo, las y los que se animen a buscar un nuevo hogar en los próximos meses posiblemente tengan que hacer números para que les cuadren las cuentas, puesto que se ha vuelto casi misión imposible adquirir una vivienda, alquilada o comprada, en la capital gallega.

El único dato económico positivo que nos ha dejado el mes de septiembre ha sido el respiro del IPC, que, con una bajada del 0.6% anual con respecto a septiembre, augura que la escalada de los precios podría estar llegando a su máximo. Y como bien es sabido, una vez llegado al punto más alto… toca empezar a bajar.

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