A Coruña acoge el 13 y el 14 de septiembre el II Congreso de Blockchain de Galicia. Tras el éxito de la primera edición en Santiago de Compostela, el evento recala en Palexco, en la ciudad herculina, con numerosos expertos en esta revolucionaria tecnología. La Asociación Galega de Blockchain (Agalbit) es una de las organizadoras del congreso.
Hablamos con su presidente y cofundador de DEXTools, Frederic Fernández Fernández, que nos desvela algunos secretos del evento y nos ayuda a comprender mejor la blockchain. Y es que esta reciente tecnología irrumpió en nuestras vidas hace 15 años y es difícil imaginar todo lo que aportará a nuestro día a día en el futuro.
Un ejemplo es ua de las pruebas que se están haciendo actualmente y que podrían cambiar nuestra rutina: el euro digital. Ante las posibilidades que ofrece esta tecnología, es fundamental la formación de la población de cara a evitar posibles fraudes o estafas, especialmente en este momento de pleno desarrollo tecnológico.
¿Qué es la tecnología Blockchain?
Es una definición muy amplia, pero podríamos decir que la tecnología blockchain está basada en la tecnología de Libro de Cuentas Distribuido y permite, a través de una red descentralizada, transmitir valor de una cartera a otra o de un individuo a otro. ¿Esto qué significa?
Que puedes enviar un valor, que puede ser dinero o cosas digitales, de una persona a otra sin necesidad de intermediarios, ya que hay una red que conecta a todos los individuos y es la que se encarga de gestionar esa blockchain y decir lo que es verdad y lo que no. Es como una libretita en la que cada uno tenemos apuntado todas nuestras cuentas y que cuando uno escribe, se escriben todas.
La blockchain centra el congreso del próximo fin de semana en A Coruña. ¿Qué se va a poder encontrar la gente?
Nuestra intención es cubrir todas las casuísticas y todo lo que se está haciendo en el ecosistema: tanto traer a profesionales expertos que están trabajando en este sector para que muestren productos en los que están trabajando como hacer talleres de iniciación. Somos un sector que tiene dos vertientes: una es muy tecnológica y la otra muy práctica. La práctica son las criptomonedas, comprar o vender bitcoin. Hay un gran componente de seguridad e incluso filosófico de autocustodia del individuo, el poder gestionar tu patrimonio sin intermediarios.
Haremos talleres prácticos para que la gente aprenda a entrar de forma segura en este mundillo y que no la estafen. Hay componentes de ciberseguridad, de regulación de lo que se puede hacer y de lo que no, de lo que está dentro de la ley, cómo declarar beneficios... Vamos a tocar también mucho la parte técnica, ciberseguridad pero también trazabilidad.
En Galicia hay una industria muy potente de trazabilidad porque tenemos mucho sector primario. La blockchain permite certificar la cadena de producción y el origen de todos esos productos sin intermediarios y con la garantía de que eso es una verdad absoluta. Hay una charla muy bonita de temas de trazabilidad del sector pesquero, de cómo podemos saber a través de la blockchain no solo donde se pescó el pescado, el barco que lo hizo, cómo se hizo y con qué arte, sino también calcular la huella de carbono y el impacto ambiental que tiene esa pesca.
Vamos a tocar aplicaciones, métodos de pago, cómo se utilizan las criptomonedas en el día a día. Y también vamos a hablar mucho de las infraestructuras que sostienen todo este ecosistema: blockchain es una palabra, pero blockchains hay muchas porque hay muchos tipos, muchas empresas que crean su propia blockchain y la ofrecen como un servicio para que otras puedan decidir y utilizar la que más les convenga según sus necesidades. Vamos a tener varias blockchains de las más importantes del mundo explicándonos tanto su ecosistema, lo que se está construyendo sobre ella, como lo que las diferencia de las demás.
En Galicia hay una industria muy potente de trazabilidad porque tenemos mucho sector primario. La blockchain permite certificar la cadena de producción y el origen de todos esos productos sin intermediarios y con la garantía de que eso es una verdad absoluta
El evento toca muchos temas de ámbitos diferentes. ¿A quién va dirigido? ¿Puede ir también gente sin conocimientos previos sobre la blockchain?
Precisamente nuestra intención es que alguien que esté interesado en el mundillo pero esté empezando, que no sepa nada, pueda venir. Y después de estos dos días de charlas, ponencias, talleres, etcétera se vaya con una buena base tanto de blockchain como de todos los temas que se van a tratar. Vamos a incidir mucho en el tema de la formación. Hay que aprender cómo aprender porque hay muchísima información y no siempre toda es buena, hay que saber identificarla.
Es muy importante que la gente venga y aprenda, porque somos un sector muy castigado por el tema de estafas. Para la gente que estamos en el sector son cosas muy obvias, pero para la que está fuera no lo es tanto, por lo que debemos enseñarles y decir: haciendo las cosas bien es muy difícil que caigas en una estafa. Hay que darse cuenta de que es un sector que está empezando, está poco regulado y no te puedes fiar de lo que ves hoy en día, pero es como cuando empezaron las compras por internet.
¿Por qué habéis elegido A Coruña como sede?
Muchos de los de la organización estamos en A Coruña, que es una ciudad que tiene un componente industrial muy potente. El año pasado lo hicimos en Santiago y este en A Coruña queremos apoyarnos en el ecosistema de la ciudad y que las empresas y toda esta industria que tenemos se involucre en el proyecto. Tenemos patrocinios de Hijos de Rivera y Noma System, empresas que están empezando a meterse en este mundo. Queremos divulgar lo que están haciendo e intentar acompañarlas en ese proceso.
Y luego, obviamente, porque es una ciudad muy bonita, muy turística y muy bien conectada, al tener aeropuerto pues es muy sencillo traer a la gente aquí. Palexco que es una zona privilegiada dentro de la ciudad, en el puerto.
Esto es algo apolítico, no se rige por ningún país ni legislación. Es todo basado en el código informático y esto es muy importante de cara de cara al usuario. ¿Por qué? Porque se utiliza para el bien, pero obviamente también se utiliza para el mal
El Congreso va a explorar la blockchain desde diferentes ámbitos en los que tiene aplicabilidad. ¿Cuáles son sus ventajas y desventajas?
Las ventajas son totalmente claras. Primero, prescindimos de intermediarios. Una vez una blockchain está funcionando, la seguridad de la blockchain la dan los propios participantes como individuos, como entidades, no hay una entidad central que sea la que tenga la verdad absoluta. La verdad se calcula por consenso y y queda escrita para siempre y en el código. Eso es muy importante porque significa que no puede venir nadie a cambiar lo que ya está escrito, es como un libro que no puedes borrar: solo puedes ir hacia adelante.
Al ser todo digital, sin intermediarios, todo se hace de manera mucho más ágil. Hay ejemplos como la trazabilidad de productos, que llegan y tienen estar esperando un papel que les permita pasar Aduanas. Eso con blockchain se haría en segundos, no se necesitaría ningún papel que justifique que ese producto es lo que dice ser y que llegó de donde tiene que llegar, y reduciría los costes de cualquier tipo de industria. Otras ventajas son que es anónima, privada y descentralizada.
Sobre las desventajas, la única que se me ocurre ahora mismo es la escalabilidad. Significa que cuando hay muchísima gente utilizando la misma blockchain, tiende a hacerse más cara. Para utilizar blockchain tienes que pagar una pequeña comisión, pero si hay mucha demanda para utilizarla, digamos que el que pague más tiene prioridad. Eso hace que las comisiones se vuelvan más caras y en muchos casos, inviables para el usuario medio.
Pero hay muchísimas blockchains que están atacando este problema. Es una tecnología que lleva poco: la primera blockchain salió en 2009. Es un sector muy inmaduro en ese aspecto tecnológico, pero se están creando muchísimas soluciones a día de hoy. Es decir, hay muchísimos proyectos, muchísimas empresas intentando construir y mejorar sobre lo que hay.
Siendo una tecnología tan reciente, ¿cree que hay cierta desconfianza alrededor de la blockchain?
Sí, pero va mejorando a pasos agigantados. Este año, por ejemplo, hemos visto cómo el sector blockchain, el sector crypto, se ha convertido en un tema de discusión en las elecciones de Estados Unidos, ya no está relegado a cuatro personas del ámbito digital. Ahora es un tema de campaña electoral y eso da una dimensión de la importancia que ha cobrado el sector en sí.
Esto es algo apolítico, no se rige por ningún país ni legislación. Es todo basado en el código informático y esto es muy importante de cara de cara al usuario. ¿Por qué? Porque se utiliza para el bien, pero obviamente también se utiliza para el mal. Y claro, hay mucha gente que aprovechando que estamos empezando y que hay mucho desconocimiento por parte del usuario y de los reguladores de cada país, comete estafas.
Por eso es tan importante la formación. Además, se están autorregulando las plataformas y cada vez son más seguras las empresas. Luchamos mucho de cara a la formación del usuario, a las buenas prácticas y a la información, y también se lo intentamos poner difícil a toda esta gente que intenta aprovecharse de los que entran nuevos. Se está haciendo una buena labor en ese aspecto.
El dinero en sí podría ser dinero digital, de hecho, se está probando el euro digital basado en la tecnología blockchain en la Unión Europea. ¿Qué pasa? Bien utilizado es muy bueno, mal utilizado es una losa más de cara al individuo
¿Cuáles son los retos de la blockchain y cómo está cambiando y va a cambiar nuestras vidas?
El reto más grande a nivel Europa es la regulación en sí y, sobre todo, las fricciones que generan las viejas estructuras tanto financieras como políticas. Esto es una tecnología muy disruptiva que puede sustituir muchísimas de las entidades que ahora damos por hechas, por ejemplo los registros de propiedad: se podría hacer todo con una blockchain. El dinero en sí podría ser dinero digital, de hecho, se está probando el euro digital basado en la tecnología blockchain en la Unión Europea. ¿Qué pasa? Bien utilizado es muy bueno, mal utilizado es una losa más de cara al individuo, porque tiene un dinero que ahora ellos pueden programar para hacer lo que quieran. Estas son las cosas que yo veo más preocupantes a corto plazo.
Estamos en un proceso de adopción bastante porque el bitcoin ya está cotizando en la bolsa de Estados Unidos y gracias a los ETF de BlackRock y otros que han salido ya se puede invertir de manera muy segura. No es como antes que tenías que irte a foros de internet a comprar las bebidas: ahora hay una entidad que te lo vende, te lo justifica y además te lo custodia para que no tengas que tener acceso a las claves.
Es como internet, si la blockchain está bien, los usuarios no tienen ni por qué saber que la utilizan. Tú estás utilizando una aplicación y por detrás tendrás blockchain y no lo sabrás. Igual que la gente no sabe cómo funciona Internet, pero sabe utilizar Netflix o Facebook. Al final se basa en los productos que se construyen sobre la tecnología y no en la propia tecnología en sí.
La mayor parte de los usos no están aún pensados, es un camino que nos lleva a un futuro que no sabemos cómo es porque hay muchas utilidades que no estaremos ni pensando y que se generarán en los próximos años. No somos capaces de imaginarlo, como ocurrió con internet: los primeros que mandaron cuatro dígitos ni se imagiban que se podría llegar a tener Twitch, Netflix o YouTube. La tecnología avanza, pero luego se ramifica y se crean nuevas oportunidades para todos.
Ahora relacionamos la blockchain con los bitcoins, pero puede ofrecer muchísimo más.
Sí. Es verdad que relacionamos mucho la blockchain con los bitcoins, que es lo más sonado, pero tiene muchísimas oportunidades a mayores. Traemos muchísimos servicios al Congreso que van a mostrar lo que están haciendo, desde TICs digitales hasta compartir información en sanidad.