El nuevo Plan de Movilidad de Ferrol, que se encuentra en fase de análisis por parte de los grupos de la oposición, va mucho más allá de la capacitación para optar a las ayudas del Ministerio de Movilidad y Agenda Urbana, ya que sienta las bases de planificación de la ciudad en términos de aparcamiento, circulación de distintos medios de transporte, etc. Desde el BNG de Ferrol ponen el foco en los 6 años de margen que el nuevo documento rector otorga a la peatonalización del barrio de A Magdalena.

A pesar de que el gobierno local ha insistido en numerosas ocasiones en la necesidad de "recuperar espacio para el peatón", el grupo encabezado por Iván Rivas entiende que se debería ir un paso más allá.

Rivas ha puesto a modo de ejemplo los datos del Plan MOB en materia de superficie destinada a los vehículos que, según señala, ocupan un 68% del total del espacio disponible en las calles. El espacio para el tránsito peatonal sería de un 32%, según destacó el portavoz del BNG.

El modelo de ciudad propuesto por Pontevedra sería, para el grupo municipal del BNG, un buen ejemplo de buen hacer y de un proceso que "levan anos recorrendo e que Ferrol é incapaz de iniciar".

Zonas de bajas emisiones

Más allá de la defensa de un modelo de ciudad u otro, desde el BNG han querido evidenciar los efectos prácticos de este tipo de decisiones pueden ocasionar en materia de tributos.

Recuerdan desde el BNG que la Lei 7/2021 de Cambio Climático y Transición Energética conlleva una serie de obligaciones para los ayuntamientos de más de 50.000 habitantes.

La redacción de un Plan de Movilidad Urbana y Sostenible o el establecimiento de Zonas de Bajas Emisiones, son algunas de las cuestiones que se desprenden del nuevo marco legal.

Entre las directrices para la creación de la Zona de Bajas Emisiones se establecen dos alternativas, según destacan desde el BNG: Prohibir la circulación en la zona a los vehículos sin distintivo ambiental y la posibilidad de cobrar un peaje a aquellos vehículos que no cumplan con el citado requisito.

El BNG entiende que optar por el pago de una cuota sería "discriminatoria para boa parte da poboación polo alto investimento que supón un vehículo eléctrico, híbrido ou mesmo de combustión con etiqueta C" y entienden que esta medida "afectaría a unha terceira parte dos vehículos inscritos no concello".

Faltaría por determinar cuál sería la extensión de la zona ZEB de Ferrol, teniendo en cuenta las dimensiones de la urbe naval y los efectos que esta tendría sobre el planteamiento actual. El borrador de directrices para la creación de zonas ZEB, publicado por el MITECO, no especifica con exactitud este extremo, pero determina que deberá ser una "zona con características adecuadas para la actuación, que incluye una parte significativa de la población, de la superficie del municipio o del tráfico de vehículos a motor".

Propuesta del BNG

Defienden desde el grupo municipal nacionalista que sería más adecuado promover la "redución dos tráficos innecesarios para o funcionamento da cidade" a través de políticas de movilidad sostenible, sin necesidad de optar por el pago de un peaje que el Ministerio defiende amparándose en el principio de "quien contamina paga".

Solicitan desde el BNG al gobierno local que aclare el modelo de implementación de zona ZEB que se va a llevar a cabo en Ferrol, dejando patente que su postura pasa promover la peatonalización con la creación de aparcamientos disuasorios, potenciación de los parkings subterráneos e incremento del transporte público para "disuadir do uso do vehículo privado" entre toda la población, según han trasladado en un comunicado.