El arco de flor preservada que Marina Allegue colocó a comienzos de verano sobre la puerta de acceso a la peluquería que lleva su nombre en el barrio de Esteiro de Ferrol (A Coruña) ardió la noche del pasado sábado. Fue la destreza de una vecina, que al momento echó cubos de agua desde su ventana, y la asistencia de una patrulla de la Policía Local lo que redujo el riesgo logrando apagar las llamas, que rozaban ya las ventanas del primer piso. "Si no, no sé qué habría pasado", agradecía Allegue esta tarde.

No hace ni un año que abrió este negocio en el número 26 de la calle Velázquez, y para darle un toque original y distinto al local adquirió dos arcos de flor preservada para decorar la puerta, uno para invierno y otro para verano.

"Es muy triste que no podamos poner bonito un negocio por miedo a esto, a que alguien venga y decida quemarlo", comenta. "¿Quién viene a quemar esto?, es desagradable". Si por algo está ahora contenta es porque "no pasó algo más grave". Al menos "no fue a más y no hubo daños personales, solo materiales". Lo que queda por delante es evaluar los daños y pintar la fachada.

Sobre las cinco menos cuarto de la mañana del domingo la Policía Local de Ferrol recibió una llamada que alertaba de lo que estaba sucediendo. Una patrulla acudió a la zona y contribuyó al apagado de las llamas.

La mañana del domingo amaneció la zona con ceniza y restos. La Policía Local "me informó de todo lo sucedido durante la noche y gestionó que vinieran a limpiarlo, estoy muy agradecida", explicaba. En ese momento presentó la denuncia ante la Policía Nacional, que ahora investiga los hechos.

Apoyo y afecto por lo sucedido

Marina está sorprendida de la cantidad de muestras de afecto y apoyo que ha recibido de parte de clientes, vecinos y amigos. También compañeros de profesión, emprendedores en otros rincones de Ferrol que han querido mostrarse solidarios con ella.

La peluquería abrió con total normalidad este mismo lunes. Mientras, Marina se debate entre poner el arco de flores de invierno o no.