Jorge Rivas y Jorge Mira con los integrantes del equipo de Nanomag.

Jorge Rivas y Jorge Mira con los integrantes del equipo de Nanomag. Santi Alvite

Santiago

La USC participa en un novedoso proyecto que llegará a los tumores con nanodispositivos

Se espera dotar a dispositivos sintéticos con una superficie de gran complejidad biológica que les permita biomimetizarse, camuflarse del sistema inmune y dirigirse a dianas de interés como órganos o tumores

9 febrero, 2021 09:16

El camuflaje de nanodispositivos superparamagnéticos para hacerlos pasar por vesículas extracelulares, o lo que es el mismo, vehículos de la comunicación intercelular entre órganos, es una de las metas del proyecto BOW ‘ Biogenic Organotrophic Wetsuits’. Esta investigación en la que participa la USC, acaba de ser financiada con 4,5 millones de euros en el marco del programa Horizonte 2020 de la Comisión Europea.

Bajo la coordinación de José Rivas, profesor emérito en la Facultad de Física, el grupo de investigación Nanomag, perteneciente al Instituto de Materiales de la USC, desarrollará una tecnología que permita “vestir” con una monocapa o multicapa estos nanocompuestos de partículas magnéticas a escala nanométrica. De este modo, se espera dotar a dispositivos sintéticos con una superficie de gran complejidad biológica que les permita biomimetizarse, camuflarse del sistema inmune y dirigirse a dianas de interés como órganos o tumores. Los científicos camuflan estos dispositivos con una membrana fabricada a partir de una vesícula extracelular que dará forma a la información contenida en el interior del nanodispositivo.

Lucha contra el cáncer

Las vesículas extracelulares con tamaños nanométricos son la pieza clave de la comunicación intercelular entre órganos “hecha por las células para las células”, señalan los investigadores, y que permiten el transporte de lípidos, proteínas y ácidos nucleicos. Al mismo tiempo, toman parte en procesos fisiológicos y participan en los mecanismos de propagación de diversas enfermedades, incluyendo cáncer e infecciones. La investigación que acaba de echar a andar y que será desarrollada por un consorcio internacional integrado por 11 socios de Italia, Alemania, Irlanda, Suiza, Estonia, Chequia y España, supone un primer ejemplo disruptivo de nanotecnología biogénica.

“El éxito de esta tecnología no incremental promoverá el progreso de nanodispositivos y nanomateriales implantables hacia la producción sostenible y la traslación clínica, contribuyendo a fortalecer y mantener la posición de liderazgo en la biotecnología europea e impactando la calidad de vida de las personas”, explica el profesor Rivas. Los objetivos del proyecto consisten en la producción de vesículas extracelulares con funciones biomiméticas y organotrópicas; la síntesis y funcionalización de nanocompuestos superparamagnéticos; así como el diseño de un dispositivo microfluídico para la fabricación simplificada de nanocompuestos recubiertos con membrana de vesícula extracelular.

En este sentido, el profesor Rivas reivindica que “los nanomateriales y los nanodispositivos constituyen una tecnología fundamental para mejorar la medicina de precisión y los enfoques terapéuticos”. En los últimos cinco años, este es el tercer proyecto europeo del programa Horizonte 2020 que obtiene el grupo de José Rivas, que tiene en vigor un cuarto proyecto europeo más de otro programa.