Los bomberos de Santiago acuden a la Rúa do Vilar ante el peligro por desprendimiento

Alrededor de las 12.30 del mediodía de este miércoles 15 de septiembre vecinos, turistas y curiosos se agolpaban en la compostelana Rúa do Vilar sorprendidos por la presencia de los bomberos y la Policía Local. 

En un primer momento los viandantes y trabajadores de los comercios y locales de hostelería de la zona intentaban averiguar qué sucedía y se preguntaban si le había sucedido algo a algún vecino, uno de los bomberos desplazados hasta allí para trabajar, aclaraba que se trataba de una labor de control del tejado de uno de los edificios.

En concreto el trabajo parece que se ha focalizado en la cubierta del número 47 del Vilar en donde vigilaban el estado de la fachada para controlar que no se puede producir ningún desprendimiento que pueda causar daño a cualquier paseante que transcurra por esta concurrida calle.

Durante los primeros minutos de la presencia de los bomberos, una patrulla de la Policía Nacional pedía a los más curiosos que por favor mantuviesen una distancia con el perímetro del edificio y que no entorpeciesen la labor que se estaba acometiendo.

La Rúa do Vilar, en pleno casco histórico compostelano, es uno de los puntos más concurridos por todos los turistas que cada año nos visitan y que, pese a que ya estamos a mediados de septiembre, siguen llegando cada día a la capital de Galicia. Además, durante esta semana, en esta calle está teniendo lugar la SELIC , la Semana do Libro de Compostela, en donde se ha creado un espacio abierto a la ciudadanía  desde el pasado dia 10 y que se extenderá hasta el domingo 19 de septiembre. En concreto, durante la jornada de hoy tendrá lugar a las 17.30 un encuentro entre activistas y creadoras de Centroamérica y Galicia.

Las labores de mantenimiento y reparación son una constante en la zona vieja de Santiago. Hace tan solo unos meses en el número 15 del Vilar, los propietarios del inmueble alertaban por quinta vez de los daños que sufría su casa por culpa de las dimensiones de los camiones que circulan por esta calle y que terminan por chocar contra la casa, causando daños en la balconada. En la última ocasión tuvieron que se retiradas algunas piedras que quedaron sueltas por el impacto y que suponían un gran peligro puesto que podrían caerse en cualquier momento.

Muy cercano al punto que esta mañana suscitaba  interés  se encuentra el edificio de los antiguos almacenes Olmedo del que los vecinos llevan alertando sobre el mal estado en el que se encuentra y que ya en 2019 provocó un buen susto cuando varios cristales de las ventanas se precipitaron y cayeron encima de un comerciante de la zona. Afortunadamente este ciudadano no sufrió daños. El edificio de Olmedo fue utilizado como sede de Compostela Aberta hace 6 años y aunque han corrido todo tipo de rumores sobre proyectos de apertura e incluso se llegó a barajar la posibilidad de abrir el Hard Rock Café Santiago, lo cierto es que no hay novedades sobre si ahora mismo hay alguna idea de negocio en marcha. Así mismo,  durante este mes de agosto siete personas fueron identificadas realizando pintadas de gran formato en el antiguo Almacenes Olmedo y que se podrán enfrentar a multas que van desde 750 a 1001 euros. Se calcula que el Ayuntamiento de Santiago emplea unos 25.000 euros anuales en acometer labores de limpieza  por este tipo de gamberradas.