Vecinos de Solláns protestando frente al edificio de San Caetano de la Xunta de Galicia.

Vecinos de Solláns protestando frente al edificio de San Caetano de la Xunta de Galicia. EP

Santiago

Más de 200 alegaciones vecinales contra la pirotécnica de Solláns en Teo (A Coruña)

En 2006 tuvo lugar un accidente en las inmediaciones de la misma empresa que afectó a unas 40 casas en un radio de 400 metros

4 agosto, 2022 16:09

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 4 Ago. (EUROPA PRESS) –

Casi una veintena de vecinos de Solláns, de la parroquia de Calo (Teo), han entregado este jueves en el Rexistro Xeral da Xunta en San Caetano más de 200 alegaciones contra la reapertura de una empresa pirotécnica próxima al núcleo urbano. "Vivimos con miedo", han apuntado.

En la madrugada del 13 de febrero de 2006, Pirotecnia Calo sufrió una explosión a tan solo 150 metros de viviendas habitadas. Aunque no causó víctimas mortales, la explosión provocó daños materiales a unas 40 casas en un radio de 400 metros, y hasta se pudo encontrar una viga de la fábrica a 200 metros del lugar, según han asegurado los vecinos en declaraciones a Europa Press.

"Queremos luchar para que la pirotecnia no vuelva a abrir, hizo mucho daño y no queremos que pase otra vez lo que ya pasó", ha sentenciado Otilia, vecina de Solláns afectada por la explosión de 2006. Además, ha especulado con que la empresa almacenará "más material del permitido" por la licencia: "Todos sabemos que no va a respetar el límite, en 2006 la explosión fue provocada por 250 kilos cuando el máximo era cinco", ha dicho.

En las alegaciones, los vecinos piden que las administraciones públicas atiendan al "principio de cautela" y "prioricen la seguridad ciudadana". "Esta actividad genera un riesgo claro y que en el pasado se evidenció que puede afectar directamente a la vida, salud y patrimonio de las personas, por lo que en consecuencia, debe denegarse la autorización solicitada", sentencia el escrito.

Riesgo para alumnos

Por su parte, la Asociación de Nais e Pais del Colegio de Calo también presentará una alegación conjunta propia este viernes. La tesorera del ANPA, Eva Peiteado, ha explicado que "hay mucho alumnado viviendo cerca de la zona" y que además, por las dos vías que pasan cerca de la fábrica transitan autobuses escolares. "Llevan a más de 175 alumnos, hacen varios viajes y pasan a menos de 100 metros, esa proximidad es un peligro constatado", ha aseverado Peiteado.

Asimismo, la militante de base del BNG y vecina afectada, Concha Lopes, ha subrayado que "no tienen nada en contra del dueño": "No tenemos nada en contra de que se monte esa actividad, pero debe ser en un núcleo donde no afecte a la gente", ha asegurado.

"Se debe ubicar en otro lugar del ayuntamiento, y para ello, tanto el dueño de la fábrica como el Gobierno municipal, deben llegar a un acuerdo. Los vecinos solo queremos vivir en paz", ha sentenciado Lopes.