#CoruñaSecreta Cenas secretas y con desconocidos en El García

En principio podría parecer una idea un poco alocada. ¿Quién quien montaría una cocina en una tienda? Y, ¿quién querría irse a cenar con desconocidos a dicha cocina? Bárbara López-Amado Fraga, el alma detrás de este espacio multifuncional que es El García, por lo que sea lo vio claro. Empezó hace un año, cuando abrió sus puertas, a publicar sus “cenas secretas” por las redes sin darles demasiado bombo. Y las llena. Aunque sea raro que se apunte una persona sola, son bastante habituales los grupos de dos o tres. Hasta el momento, cerraban el cupo en 12 personas, pero, dado el éxito de esta y otras iniciativas que tienen que ver con la cocina, han decidido ampliar el espacio con la sala de al lado. A partir de este viernes, tendrán capacidad para unas 20.

Bárbara pasó de ser interiorista a idear este espacio multifuncional que es El García

Desde el escaparate de El García, situado en la calle San Roque, al ladito de Plaza de España, se ve ropa, calzado, bolsos, libros, cuadros, vajillas o incluso vinos. Pero no cazuelas. Y es que, ¿qué pinta una cocina en una tienda de ropa?. “Siempre tuve la idea de montar una tienda distinta. La idea de una cocina surgió un poco de amigos. Tengo amigos que cocinan muy bien y vas a su casa pero no les ves el pelo. Nos reunimos los demás. Quería crear un punto de encuentro. Un lugar donde cocinar todos juntos”, nos cuenta, apoyadas en la enorme mesa alta y de madera que protagoniza la cocina, al fondo de su local y visible desde el mismo a través de una ventanita. En medio de la mesa, integrada en la madera, una vitrocerámica. Porque si vienes a cenar a El García, te cocinan y emplatan en vivo y en directo.

La cocina, detrás de la ventanita al fondo del local

“Se crea un rollo especial. Depende mucho del chef que tengas. La persona que cocina hace de nexo de unión, así que tiene que tener un algo más, no solo cocinar bien”, resume sobre el ambiente de las cenas. “La gente repite”, asegura, tanto que está planteándose crear una tarjeta de fidelización para los incombustibles de las cenas de El García.

A mesa puesta y listos para empezar a cocinar

También talleres y cenas privadas

Bárbara no pone muchos límites para ese punto de encuentro que es su cocina. Al margen de las cenas secretas, también la usa para eventos privados, esto es, para aquellos que quieren una cena diferente, con cocina en directo, y alejada del típico privado de un restaurante. Tiene su punto, hemos de reconocer, atravesar una tienda para irte a cenar. Allí se celebran desde cumpleaños hasta cenas o comidas de Navidad con amigos o compañeros -al parecer, las pasadas fiestas los eventos privados de El García fueron un hit absoluto-. Bárbara te abre la cocina y tu eliges cómo.

“Puedes cocinar tú o podemos montarte un catering o un showcooking. Es lo más diferente. Te lo preparan aquí y se emplata ante ti”, resume esta antigua interiorista, a la que la crisis le hizo replantearse su vida y su actividad. En esta cocina oteamos una amplia nevera, hornos y demás electrodomésticos. También tienen varias vajillas y mantelerías, para que decores como quieras e incluso existe la opción de que te hagan la compra. Bárbara propondrá el chef y el menú, en función de tu presupuesto. Eso si, te libras de limpiar, eso va a cuenta de la casa.

La cocina con sus mandiles lista para ensuciarse

Los mandiles que vemos colgando son para cuando la cocina se transforma en aula para los numerosos talleres de cocina que también se organizan por aquí. De cocina japonesa, de pasta fresca, de risotto, de empanada gallega, de Haz tu Pan de Verdad… “Muchas veces vienen los chef y me lo proponen ellos. Les apetece compartir conocimientos de una manera algo más informal porque esto no es formación reglada”, señala. “Tengo a dos chicos que trabajan en restaurantes japoneses y que vienen aquí en sus horas libres.

La cocina centra mucha actividad en El García, pero no solo de fogones se vive por aquí. Bárbara ha organizado talleres de fotografía con Cristina Pontanilla, de maquillaje con Diana Fraga o de kokedama (técnica de cultivo japonés que no usa jardineras) con Rodrigo Iglesias, que hace jardines verticales.

Te encontrarás con ropa, bolsos, calzado, libros, muebles, que también están a la venta, o cuadros

Sólo una talla de cada

Realmente, El García es un espacio al que le cuesta entrar en una sola definición. “No somos una concep store al uso. Aquí tenemos tienda gourmet y tenemos mucho espacio para creadores de aquí. Gente que arriesga de aquí de Coruña y de Galicia. Gente que escribe, que diseña, que canta, que pinta”. Bisutería de Perdona Bonita, ropa de niños de Inés Loves Kids, bolsos y complementos de Jerolas, sudaderas de Mr Fou, el poemario Versos on the Rock de Álvaro Dorda o el disco de Nortones. Todo esto puedes encontrarte en El García.

El interior de la tienda y su zona gourmet

Bárbara sobre todo vende productos made in Spain -aunque han entrado un par de marcas nórdicos recientemente-, y de proveedores que apuesten por la producción sostenible. También trae cosas diferentes, prendas distintas y en poca cantidad.  “Tenemos colecciones compradas de marcas que no suele haber. Traemos una talla de cada modelo. Si se vende, se acabó. No reponemos las piezas. Son prendas especiales, con estampados llamativos por ejemplo. No te apetece irte a tomar un vino y encontrarte 10 iguales”, nos cuenta Bárbara. Y ella, de marcar la diferencia, algo sabe.