Rutas a caballo: la nueva opción de ocio en Valdoviño (A Coruña) de la mano de Cabaliño do Lago

Una coruñesa y una lucense, Paula Soto y Tamara Rodríguez respectivamente, han apostado por la localidad de Valdoviño (A Coruña) para implantar su nuevo negocio, Cabaliño do Lago, que ofrecerá rutas a caballo y campamentos para niños en las inmediaciones de la laguna de A Frouxeira.

La idea de crear este centro ecuestre surgió gracias a la dilatada experiencia de ambas en el mundo de la hípica y tras experimentar "formas de trabajo y contratos precarios", explica Tamara. A partir de ahí, empezaron a pensar en crear un modelo diferente de gestionar lo que denominan el mundo del caballo y crearon el centro en el que tratan al equino en libertad, sin cuadras y en un entorno natural.

Las rutas se realizarán a lomos de sus ocho caballos entre los que figuran un silla francés, un hispano-árabe y algún cruce de lusitano.

Con una duración de los recorridos desde los 15 minutos, para los más inexpertos, hasta de cuatro horas, los precios oscilan entre los 15 y los 100 euros. Los trayectos descubrirán a los "jinetes" un paisaje inimitable a través de caminos secundarios que los llevarán desde la laguna hasta el faro de A Frouxeira en la parroquia de Meirás.

Este servicio está disponible para grupos de hasta cuatro personas que irán en todo momento acompañados por una de las propietarias de Cabaliño do Lago.

Campamentos para niños y niñas

Además de una alternativa de ocio, Cabaliño do Lago se presenta como un nuevo recurso de conciliación para las familias. Este mismo lunes 25 de julio echarán a andar sus campamentos para niños de 5 a 16 años, en horario de 9:00 a 14:00 horas, "el mismo que el colegio", indica Tamara, aunque también habrá horario para madrugadores con entrada a partir de las 08:00 horas.

En este servicio, los participantes aprenderán pautas para el manejo y cuidado del caballo y para la iniciación en la monta.

Apuesta por la comarca

Tamara y Paula decidieron apostar por Ferrolterra, y más concretamente por la parroquia de Lago en Valdoviño, porque la primera veranea en dicho lugar desde hace más de 30 años y "he visto el aumento tanto de la natalidad como del turismo", afirma. Destaca que "somos más de bosque" pero la lógica les indicó que este era el lugar adecuado para establecer su negocio dados los atractivos turísticos y el potencial que tiene la comarca.

Dada la proximidad al mar, no han podido construir una nueva edificación pero sí instalar una casa prefabricada con todo lo que pueden necesitar tanto los participantes en las rutas como los niños de los campamentos. "Tenemos baño, un almacén y un vestidor donde se pueden cambiar" tras disfrutar de las rutas. El resto, espacio abierto con sendas pistas de 30×25 y 50×50 metros y un picadero de doma.

Una de las quejas de todo emprendedor, y de la que ellas no consiguieron escapan, es la dificultad de poner en marcha cualquier negocio y "si hay animales de por medio, se multiplica la dificultad", explica Tamara, porque necesitan permisos especiales para cumplir con la legislación vigente. "Falta información", añade. Además, cuenta que el capital inicial procede en su integridad de los bolsillos de ambas, aunque les ha sido concedida una subvención que esperan que la Administración correspondiente les ingrese a lo largo del año. Critica también los tiempos de las Administraciones: "la burocracia siempre te retrasa, abres más tarde por este motivo y cada día que no puedes ofrecer tus servicios es un gasto que tienes", concluye.

Cabaliño do Lago nace con la intención de estar operativo no sólo en temporada estival, sino todo el año. Quienes lo deseen, pueden efectuar sus reservas u obtener más información en Instagram, Facebook, o a través de los teléfonos 634 45 41 61 y 664 45 49 60.