Resulta increíble el poder que puede tener sobre un niño o niña alguno de los regalos que puedan recibir durante su infancia. Un simple coche, un puzzle o un muñeco puede marcar su destino. Eso fue lo que hizo un juego de Magia Borrás que apareció bajo el árbol de navidad del mago Dani Polo (Melide, 1998) cuando solo tenía ocho años y que, unido al talento y al trabajo a lo largo de los años, ha conseguido no solo ser reconocido en los límites de nuestras fronteras, sino también a nivel europeo.

La ciudad de Ferrol podrá disfrutar esta noche de su espectáculo de Grandes ilusiones en la Gala internacional de magia en el Teatro Jofre que se enmarca en uno de los mayores festivales de ilusionismo de toda Europa, Galicia Ilusiona, y que él mismo, junto al mago Pedro Bugarín y con el apoyo del Xacobeo 21-22 y Fundación La Caixa, ha puesto en marcha este año con una clara vocación de continuidad. Las entradas ya están agotadas para la función de esta noche.

Aquellos espectadores que hayan conseguido entrada para esta noche, ¿qué van a ver?

Esta gala va a reunir a los mejores magos del mundo, cada uno en su especialidad. Desde Corea vendrá Hyunjoon Kim con su número basado en una de las ramas más difíciles de la magia que es la manipulación: hacer aparecer y desaparecer cosas con las manos. Jimmy Delp, de Estados Unidos, ofrecerá una magia cómica muy espectacular, es como estar viendo dibujos animados. También participará el francés Arnó, que recorrió los mejores teatros de todo el mundo, y el chino Zheng, con una magia poética muy visual. Todos los números estarán presentados por la comunicadora gallega Esther Estévez.

El mago gallego en el término de uno de sus espectáculos. Imagen cedida

Tu especialidad son las grandes ilusiones, personas que aparecen de la nada, que se teletransportan… ¿con qué sorprenderás al público?

Las grandes ilusiones es la magia a lo grande en la que se emplean grandes aparatos donde se involucra a más gente. La mía será una intervención de 15 minutos muy intensos, donde se va a poner en escena un número frenético que va a dejar al espectador pegado a la butaca y con los ojos bien abiertos porque si pestañea, se lo pierde. Este número lo hacemos un equipo de cinco personas, pero también pediremos la participación de una persona voluntaria del público.

¿Cómo ha sido acogido el festival por parte del público?

Muy bien. Antes de las galas que están recorriendo las ciudades gallegas, hemos hecho desafíos extremos en agosto, como el de escapismo del pasado día 17 en la plaza de Armas, y entre estos dos formatos ya hemos contado 40.000 asistentes. Ya hemos estado en A Coruña y en Lugo y ahora nos queda esta noche Ferrol, el 24 de septiembre Pontevedra, el 1 de octubre Ourense, el 9 de octubre Vigo y el 15 del mismo mes Santiago. Las entradas ya se han agotado con bastante tiempo de antelación y han contado con un precio reducido (12 euros) para lo que es una gala de estas características propia de ser celebrada en grandes ciudades con otro coste para el público y esto ha sido posible gracias al Xacobeo 21-22 y Fundación La Caixa.

En lo que respecta a la organización, ¿ha sido difícil congregar a estos nombres de la magia en Galicia?

No es fácil cuadrar la agenda. Son magos muy premiados que están en los más prestigiosos festivales y poder tenerlos aquí es un lujo. En estos dos meses de duración de la gira y de los retos que hemos hecho, se están alojando en diferentes apartamentos en Melide y estamos aprovechando para que conozcan Galicia. Ya hicieron una etapa del Camino de Santiago y les encanta el pulpo y los paisajes que están viendo.

El prestidigitador durante uno de sus números de grandes ilusiones. Imagen cedida

En tu trayectoria individual en el ilusionismo, además del Magia Borrás, ¿hubo algo más que te hiciese sentir que la magia era el camino que debías seguir?

Después de ver en televisión a un mago de Las Vegas que hacía cosas increíbles, me dije "quiero hacer cosas que los demás no puedan hacer". Me gusta buscar soluciones a cosas que, aparentemente, son imposibles.

¿Dónde te formaste como mago?

Asistí tres años a la escuela de magia del mago Rafa en Lugo. Creo que ahora ya no queda ninguna en Galicia. Aprendí muchísimo en esa etapa y después continué formándome asistiendo a congresos, cursos y conferencias por toda España. También hay una parte autodidacta.

¿Es difícil avanzar en cuanto a formación en un mundo tan hermético como el de la prestidigitación?

Es difícil encontrar información. La magia vive del secreto. Pero hay mucho más allá de la trampa en el ilusionismo. Hay una parte de psicología con el espectador a través del dominio gestual, la generación de emociones, sensaciones… Todo eso no se aprende en vídeos de Youtube y es quizás más importante que el propio truco.

¿Cuántas horas al día dedicas a la magia?

No tenemos una jornada horaria tan marcada como en otras profesiones y los magos tenemos un problema, y es que nuestro hobby coincide con nuestro trabajo. Dedicamos muchas horas, aunque estemos en nuestro tiempo de ocio porque te surgen ideas y las tienes que apuntar. Hay jornadas de ensayo y los días de función vas al teatro a preparar el número. También hay trabajo de oficina.

Uno de los mayores reconocimientos en tu carrera profesional llegó en 2018, cuando recibiste el Premio Ali Bongo al mago revelación europeo del año. ¿Este hecho ha supuesto un antes y un después para Dani Polo?

Fue algo inesperado. Me lo dieron en Francia, durante el congreso nacional de magos en el que durante cinco días hay conferencias, actividades y en el último día tiene lugar una ceremonia en la que me hicieron entrega del premio. Fue un honor que profesionales del mundo del ilusionismo decidiesen darme este galardón que, sin duda, me trajo mucho trabajo a posteriori en diferentes lugares.

Hablando de profesionales del sector, ¿cuáles son tus referentes?

Me encanta un mago argentino que ya no está con nosotros. Se llamaba René Lavand. Mezclaba magia aparentemente muy simple y sencilla con la poesía. Fue una leyenda viva de la magia y desarrolló su carrera solo con el brazo izquierdo, tras perder el derecho en un accidente, lo cual tiene un mérito increíble. También admiro a David Copperfield, con el que me identifico por la espectacularidad de sus números en los que juega con los efectos especiales, la iluminación, el sonido…

En tu formación reglada figura el grado en Comunicación Audiovisual y además ejerces como presentador. ¿Con cuál de los dos mundos te quedas, el de la comunicación o el de la magia?

Tengo 24 años y mi gran sueño es poder dedicarme toda la vida a la magia como hago en la actualidad. Los estudios forman parte de un plan b.