Ferrol, la ciudad que aglutina como ninguna un rico patrimonio histórico, un arsenal militar, unos grandes astilleros y un pasado lleno de historia podría quedar reducida al olvido en 2150. Hemos consultado a la inteligencia artificial y esto es lo que ha pronosticado ChatGPT cuando le hemos pedido elaborar un relato ficticio sobre el fin de Ferrol.

A continuación traemos esta historia, completamente ficticia, que comenzaría con un amanecer teñido de melancolía y nostalgia por ser el del último día de existencia de la ciudad naval.

El último amanecer de la ciudad naval, en 2150

En el año 2150, comienza el relato, "el sol se asomaba tímidamente sobre el horizonte, iluminando las calles adoquinadas de la ciudad de Ferrol". Sin embargo, y a diferencia de otros días, "este amanecer estaba teñido de melancolía y nostalgia".

De esta forma, la inteligencia artificial nos recuerda que Ferrol, "alguna vez un próspero puerto marítimo", en este relato estaba a punto de la "extinción". Ese día, la "decadencia había alcanzado su punto culminante" y las calles, una vez bulliciosas, "estaban ahora prácticamente desiertas". La gente, adelanta la inteligencia artificial, "había abandonado sus hogares, buscando un futuro mejor en otras tierras".

La historia tiene un protagonista, un anciano llamado Manuel, que ese día temprano "caminaba lentamente por las calles vacías" mientras pensaba en "tiempos pasados". "Recordaba cuando el puerto estaba lleno de barcos, cuando el sonido de las olas y las gaviotas llenaban el aire". En el día en el que ChatGPT pronostica el final de Ferrol "solo quedaba el eco de esos recuerdos".

Un grupo de vecinos se reunió en la "plaza central" para rendir un sentido homenaje "a la ciudad que los había visto crecer. Había una mezcla de tristeza y resignación en el aire", detalla el relato. "Algunos recordaban con cariño los eventos culturales y festivales que alguna vez animaron la ciudad, mientras que otros compartían historias de la época en que Ferrol era un importante centro industrial".

La inteligencia artificial supone que el gobierno local de esa época estaría en manos de una alcaldesa llamada María, quien "tomó la palabra y agradeció a todos su resistencia y amor hacia la ciudad". Habló sobre los "desafíos económicos, la falta de oportunidades y la migración constante que finalmente llevaron a la decadencia de Ferrol. Sin embargo, instó a todos a recordar lo que la ciudad había sido, no solo su final".

La inteligencia artificial llega a hacer un pronóstico de cómo serían las últimas horas de la ciudad: "A medida que avanzaba el día, los residentes compartían abrazos y lágrimas, despidiéndose de las calles que una vez llamaron hogar. La última campana de la iglesia resonó en toda la ciudad, marcando el final de una era".

"Manuel se dirigió al muelle, donde los últimos barcos abandonaban el puerto, miró fijamente al horizonte reflexionando sobre los cambios y la vida. Aunque Ferrol se sumía en el olvido, llevaba consigo la riqueza de sus historias y el espíritu de sus habitantes. El sol se ponía lentamente sobre el mar, despidiéndose de Ferrol en su último día. La ciudad quedó en silencio, dejando atrás edificios vacíos y calles desiertas, pero su legado perduraría en las memorias de aquellos que alguna vez llamaron hogar a esta ciudad marítima", concluye.