Aunque los tiempos han cambiado, casarse sigue siendo una tradición presente en muchas parejas. Las bodas están en auge tras la pandemia, pero las cifras a nivel nacional han bajado si comparamos con datos desde 2019 hacia atrás. La gente que da este paso lo hace cada vez a una edad mayor, superando los 30 años de media en España.

Otra de los grandes cambios se produce en la forma de casarse. Tradicionalmente la gente lo hacía por la iglesia, pero el matrimonio por lo civil se ha incrementando cada vez más. Galicia es de hecho una de las comunidades en las que más destaca esta diferencia.

Así se puede ver en el estudio Matrimonios en España de TBS, que señala que en Galicia los matrimonios por lo civil en el año 2022 supusieron un 87% del total, mientras que las bodas por la iglesia quedaron reducidas a un 13%.

El estudio comprende datos desde el año 2013. En menos de 10 años, los matrimonios por lo civil en Galicia aumentaron un 20%, pasando de suponer el 67% en 2013 a ser el 87% en el año 2022. La comunidad gallega está por encima de la media nacional, que es del 81%.

Desde 2013 el número de bodas se ha mantenido por debajo de las 10.000 y ha aumentado notablemente en 2022 llegando a las 9.508. Esta cifra es la más alta de todos los años del estudio, pero está influenciada por todos los compromisos que tuvieron que ser aplazados a causa de la pandemia y que hicieron que la cifra en 2020 se quedara en 5.617.

¿La gente se casa menos que antes?

Pese a que los datos demuestran que en países como España los casamientos están en auge, se trata de un fenómeno que tiene que ver con la recuperación post-pandemia. En este sentido, cabe destacar que a nivel nacional aún no se ha alcanzado el número de casamientos que había antes de que irrumpiera la Covid-19, en 2020, según indica el estudio.

Los resultados de este estudio demuestran que, mientras que la ratio de casamientos en España es actualmente de 3,1 por cada 1.000 habitantes, en 2020 era de 1,9. Sin embargo, la tendencia general es a la baja, ya que todavía no se ha alcanzado el ritmo previo a la pandemia: en 2019 la ratio era de 3,5

Alemania, pese a tener una de las ratios más altas de la UE, no aumentó la ratio de matrimonios después de la pandemia. De tal forma que también presenta una tendencia a la baja y poco a poco se va acercando a los niveles de la UE o los de Portugal.